España no consigue situarse como un destino de referencia en el Turismo de lujo. Según revela el informe ‘El turista de lujo en España ¿un desconocido?’, presentado por Global Blue, nuestro país únicamente logra captar el 13% de este perfil de viajeros, porcentaje que dista de los porcentajes superiores al 30% de grandes potencias como Francia, Reino Unido e Italia.
Francia capta un 36% de estos viajeros
El estudio constata la falta de posicionamiento de España como destino de lujo para las operaciones tax free, que representan 90.000 millones de euros anuales. De hecho, llama especialmente la atención que siendo el segundo país en número de llegadas de turistas internacionales, ocupe el séptimo puesto en el listado de principales países receptores de viajeros de alto poder adquisitivo. El ranking lo lideran Francia, que capta un 36% de estos viajeros, seguido de Reino Unido e Italia, ambos destinos con un 31%.
La importancia de los turistas de alto poder adquisitivo es tal que, pese a que son un 0,5% del total de viajeros, concentran el 17% de las ventas tax free que se efectúan en los comercios. Sin embargo, España no los está sabiendo aprovechar, pues realizan un gasto hasta un 62% inferior en comparación con otros destinos europeos. Así, mientras España solamente capta el 37% del presupuesto de los turistas de alto poder adquisitivo que nos visitan, con un gasto medio de 22.000 euros, en otros países competidores la cifra llega al 60%, como por ejemplo en Reino Unido, donde desembolsan unos 35.000 euros de media en compras.
Resulta imprescindible conocer cómo son estos viajeros
Para Global Blue, resulta imprescindible conocer cómo son estos visitantes, saber lo que demandan y perfilar así lo que España puede ofrecerles como destino. Bajo esta premisa, el informe muestra una radiografía completa del viajero de alto poder adquisitivo, cuyo perfil es el de una mujer, asiática, millennial y que viaja entre tres y cuatro veces al año, con una estancia de entre cinco y diez días cada vez.
Además, este turista se caracteriza por su alto desembolso, con una media anual de entre 50.000 y 210.000 euros, sobre todo en artículos de lujo únicos y de colecciones limitadas o exclusivas, además de tener predilección por la joyería (45%) y los complementos (32%), bastante más que por la moda (18%).
Por nacionalidades, China es la que más turistas de lujo aporta tanto a Europa como a España, representando un 39% de los viajeros de alto poder adquisitivo en el país. Sin embargo, mientras los turistas de lujo del sudeste Asiático y del Golfo Pérsico representan un buen trozo del pastel para los grandes destinos europeos, aglutinando el 15% y el 14%, respectivamente, en España estas nacionalidades aportan solo el 11% y el 9%.
En cambio, España sí se muestra más preparada para atraer a viajeros de élite de Rusia y del centro y sur de América, representando el 10% y el 8% de las llegadas de estos perfiles de viajeros, mientras que a nivel global estas nacionalidades apenas alcanzan el 6% y el 2%.
El CEO de Global Blue, Jacques Stern, explica que «para que España pueda reforzar su atractivo en este mercado y competir con sus vecinos europeos, debe seguir mejorando su posición como destino de compras de lujo para los viajeros de Asia y Oriente Medio». «Las claves son conocer sus motivaciones, hábitos y comportamientos y desarrollar así una mejor experiencia, así como realizar una mayor promoción y establecer una mejor conectividad aérea», añade.
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