El Sector en España se encuentra en la senda de le recuperación, tanto en cifras de llegada de turistas como de ocupación hotelera, aunque sin llegar a los resultados de 2019. Actualmente, la posición económica de las empresas de la industria turística continúa debilitándose por la la inflación, los altos costes de energía y del petróleo y de la subida de los tipos de interés y, al mismo tiempo, el sector se enfrenta a un conjunto de retos estructurales que amenazan con una pérdida de competitividad.
Durante la presentación de lac conclusiones del informe, el presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha señalado que el Sector debe apostar por el talento y la innovación para ganar el futuro. Para ello, ha considerado necesario hacerlo “atractivo para la gente joven” y dotarlo de un PERTE “realmente potente” en el marco de los fondos europeos.
El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha señalado que el Sector debe apostar por el talento y la innovación para ganar el futuro
De otro lado, David Rodríguez, socio director de la industria de Transporte, Hostelería y Servicios de Deloitte, ha señalado que “nos encontramos en un punto en el que tenemos la posibilidad de evolucionar nuestra oferta turística y modelo de relación con el viajero para mantener el liderazgo internacional como destino turístico único, lo que hemos logrado alcanzar en los últimos años”. Rodríguez, además, ha añadido que “este Plan no sustituye a la Estrategia de Turismo Sostenible 2030, sino que pretende ir movilizando al sector hacia una agenda de transformación común y asentar las bases para la captura de resultados en el corto/medio plazo”.
Plan de acción
El estudio advierte que la industria tiene que hacer frente unos retos que amenazan con interrumpir la tan necesaria recuperación: la necesidad de disponer de una oferta turística atractiva que permita captar y fidelizar al viajero; objetivos y visión comunes para que el impacto de los fondos europeos genere una transformación relevante en el sector; y a situación de las empresas, que, ante la incertidumbre económica actual, han multiplicado su nivel de endeudamiento.
Por este motivo, ambas entidades han destacado el papel clave de una España conectada, estableciendo puentes con mercados clave a través de la conectividad aérea y transformando los aeropuertos españoles en hubs competitivos para facilitar la llegada de turistas internacionales. La internacionalización de las empresas pondrá en valor los negocios en el exterior y generará reconocimiento entre los viajeros. Igualmente, mediante la conexión de infraestructuras de transporte se potenciará el movimiento de los viajeros dentro del territorio y se fomentará el acceso a regiones menos visitadas.
Asimismo, también habría que contemplar una transformación competitiva del tejido empresarial y los destinos, poniendo foco en prácticas que impulsen la sostenibilidad en toda la cadena de valor, la actualización de activos y la adopción de nuevas tecnologías para modernizar a las empresas del sector.
De otro lado, han resaltado la fidelización del viajero, a través de la transformación digital de todo el sector, con el objetivo de que el destino mejore la experiencia del turista end-to-end: creando una red de movilidad interconectada donde se integre la red de medios de transporte a todos los niveles; actualizando el modelo de relación con el cliente, introduciendo nuevas tecnologías para que el turista esté siempre conectado; y generando inteligencia del turista, de forma que disponga de información actualizada para mejorar su experiencia del viaje.