En un comunicado, la aerolínea con sede en Dubái se negó a cumplir con las solicitudes "irrazonables e inaceptables" de eliminar vuelos durante su temporada alta y ha criticado a la gerencia de Heathrow por la falta de preparación y la mala comunicación. "LHR nos ha dado 36 horas para cumplir con los recortes de capacidad, una cifra que parece haber sido arrancada de la nada. Sus comunicados no solo dictaron los vuelos específicos en los que deberíamos expulsar a los pasajeros que pagan, sino que también amenazaron con emprender acciones legales por incumplimiento", revela la compañía.
La aerolínea con sede en Dubái se negó a cumplir con las solicitudes
La aerolínea también ha insistido en que sus servicios en Heathrow están "totalmente listos y capacitados" y que los retrasos actuales en el aeropuerto se deben a "los servicios y sistemas centrales que son responsabilidad del operador del aeropuerto".
"LHR optó por no actuar, no planificar, no invertir. Ahora que se enfrentan a una situación de 'airmageddon' debido a su incompetencia y falta de acción, están trasladando toda la carga, los costes y la lucha para solucionar el problema, a las aerolíneas y los viajeros", ha señalado la aerolínea en un comunicado.
"Mover algunas de nuestras operaciones de pasajeros a otros aeropuertos del Reino Unido con tan poca antelación tampoco es realista. Garantizar la preparación en tierra para manejar y dar la vuelta a un avión de fuselaje ancho y largo recorrido con 500 pasajeros a bordo no es tan simple como encontrar un lugar para estacionar en un centro comercial", han incidido.