Fitur sigue ajustándose a la realidad del Sector Turístico. Aunque los esfuerzos de la organización, que mantiene congeladas las tarifas y está aplicando descuentos por pronto pago, permitirán mantener un número de expositores similar al de la pasada edición, lo que sí variará es el espacio contratado por los mismos. Según las estimaciones de su directora, Ana Larrañaga, la próxima edición, que se celebra entre el 18 y el 22 de enero, rondará las 10.000 empresas participantes, cifra similar a la del año anterior.
Sin embargo, la reducción presupuestaria, que afecta en mayor medida a las Comunidades, se verá reflejada en el espacio contratado. "Todas las Comunidades estarán representadas, algunas con la misma superficie que el año anterior, pero nos hemos encontrado con numerosos casos de adaptación debido a sus ajustes presupuestarios, lo que se ha traducido en una disminución de los metros cuadrados de sus estands", explica la directora.
En este contexto se desconoce si se podrá llegar a la cifra de diez pabellones abiertos, hasta que no se concreten todas las contrataciones por parte de las Comunidades. La organización del evento justifica que los cambios derivados de las elecciones municipales han provocado que los nuevos equipos de gobierno necesiten tiempo para ajustar sus presupuestos y tomar decisiones.
A expensas de lo que pueda suceder en esta edición, en la de 2010 la organización ya se vio obligada a reducir el número de pabellones. En concreto, se dejó de utilizar el 12 y el 14, volviendo a las dimensiones de 2007, cuando la feria contaba con diez pabellones.
La feria espera alcanzar los 200.000 visitantes
En lo que respecta al número de visitantes, la organización espera que se mantengan las mismas cifras que en 2010, por lo que previsiblemente se rondarán los 200.000. Si bien Larrañaga afirma que lo más probable es que las empresas participantes en el evento y las Comunidades autónomas reajusten el número de sus invitados. Igualmente, destaca que "hay muchos menos profesionales en activo teniendo en cuenta que el paro ha aumentado en el Sector como consecuencia, entre otros ámbitos, del cierre de agencias de viajes".
Los organizadores de la feria reconocen que Fitur es un reflejo de lo que ocurre en la economía nacional, y si bien el Sector Turístico ha comenzado a registrar una leve recuperación, la crisis también es patente. "Dentro de la parte institucional podemos comprobar unos ajustes económicos de los participantes, que como consecuencia de un recorte en sus presupuestos se han visto obligados a destinar menos recursos financieros a la feria", detalla Larrañaga. Para la directora, esto es un reflejo cuantitativo pero no cualitativo, puesto que lo que contratan es menos espacio, pero siguen participando en la feria con el mismo interés que en ediciones pasadas.
A esto se une un escenario internacional complicado. "Las dificultades económicas de países como Portugal, Grecia o Italia, se suman a la retirada de la feria de países como Siria o Libia, cuya situación política les hace muy difícil participar en estos eventos", señala Larrañaga, que al mismo tiempo confirma que, por el contrario, otros países como los iberoamericanos han aumentado sus empresas y su espacio contratado.
Las Comunidades autónomas ‘sacan la tijera’
Los recortes aplicados por las Comunidades autónomas para reducir su déficit han marcado una nueva era en la promoción turística en nuestro país, lo que se traducirá en un recorte drástico de su espacio y su presencia en Fitur. Entre los casos más llamativos está el de la Región de Murcia, que no tendrá estand en Fitur 2012, sino un espacio con mesas y sillas sin decoración alguna. De este modo, cambiará el estand de 1.000 metros cuadrados valorado en 600.000 euros por un espacio profesional de 200 metros cuadrados de 70.000 euros, según ha declarado el consejero de Cultura y Turismo, Pedro Alberto Cruz.
Al respecto, señala que este recorte presupuestario "no va en detrimento de la promoción turística de la Comunidad, porque el nivel de las reuniones y de toda la zona profesional va a crecer con la celebración de mejores encuentros y mesas de trabajo". El consejero ha comentado que esta "novedad debe enmarcarse dentro de la nueva política turística de la región, que pasa por la reorientación de todas las labores de promoción de la oferta turística". Además, el dinero que no se gasta allí "se va a derivar a otra serie de acciones, como las misiones comerciales en el extranjero, a través de las cuales se van a conseguir muchas líneas de negocio", ha añadido.
Por su parte, la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía anunció el pasado mes de agosto que contaba con un presupuesto de 1,8 millones de euros para las acciones de promoción turística con motivo de Fitur. Durante varios años, Andalucía destinó cerca de tres millones de euros cada año a su participación en esta feria, pero en 2009 ya se aplicó un primer recorte. Desde entonces, el presupuesto ha menguado cerca de un 38%.
El Gobierno balear también hizo público este verano un rediseño de la presencia de la Comunidad en las principales ferias de Turismo, entre ellas Fitur, por lo que reducirá el espacio que ocupa su estand y acortará la estancia de las autoridades. Según ha explicado la Consejería de Turismo y Deportes, el Ejecutivo pretende dar "más entidad" a la parte profesional y reducir la presencia institucional y los gastos que ésta comporta. De esta manera, se eliminarán costes de representación institucional "que implican cuantiosas cuantías de desplazamientos, estancias en hoteles o caterings", ha subrayado.
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