La compañía ha destacado que, con esta herramienta, se convierte en "uno de los pocos complejos turísticos de todo el mundo" que dispone de una herramienta que contribuye a reducir el impacto medioambiental tanto en la vida cotidiana como en la actividad turística.
El funcionamiento de la calculadora de emisiones de dióxido de carbono es "muy sencillo" y permite hacer dicho cálculo tanto en la vida cotidiana, las vacaciones o durante los desplazamientos, en función del medio de transporte utilizado y los kilómetros recorridos.
Además, una cualidad importante de esta herramienta es que permite hacer el cálculo combinando del consumo en la vivienda y en el transporte, ofreciendo el valor final, tal y como ha explicado Zmar.
Así, el usuario "sólo tiene que introducir una serie de parámetros que le pide el sistema, como el número de personas que residen en la vivienda, la producción de residuos, el consumo de electricidad y el resultado final, es decir, el número de toneladas de dióxido de carbono que se emiten a la atmósfera, se facilita por persona durante un mes y un año".
El complejo turístico ha precisado que, al final, también se proporcionan una serie de medidas para reducir dicha emisión, tanto en la vida doméstica, como en los desplazamientos.








