Jens Bischof

Ha pasado cerca de un año y medio y, al menos de momento, ninguna compañía aérea ha adoptado una estrategia similar a la emprendida por Lufthansa, que desde el 1 de septiembre de 2015 cobra 16 euros adicionales por cada reserva vía GDS. Y ello a pesar de que el grupo defiende el "éxito" del modelo.

Lufthansa incide en el "éxito" que está teniendo su nueva estrategia de distribución, puesta en marcha el pasado 1 de septiembre de 2015 y que incluía la aplicación de un recargo de 16 euros a las reservas efectuadas en un GDS. Según destaca, desde que se presentó en junio, el grupo aéreo ha obtenido "grandes logros", consiguiendo un incremento de las conexiones directas de agencias y turoperadores con el sistema de reservas propio de las compañías aéreas que forman parte del grupo (Lufthansa, Swiss, Austrian Airlines y Brussels Airlines).

Lejos de dar marcha atrás en su nueva estrategia comercial, que penalizará a los intermediarios, Lufthansa subraya que la implantación del polémico recargo contribuirá a que el coste de las reservas a través de GDS sea "más justo y transparente". Además, adelanta que ofrecerá nuevas soluciones tecnológicas.

Lufthansa introduce un nuevo sistema de tarifas para los vuelos en Europa. Esta medida se enmarca en la reorientación de la estrategia de ventas del grupo aéreo, que si nada lo impide, comenzará aplicar un recargo de 16 euros a las operaciones efectuadas a través de un GDS a partir del 1 de septiembre.