Arabia Saudí maniobra con el secretario de la OMT para arrebatar la sede a España
España, ante esta amenaza de dejar a Madrid sin la OMT ha sacado sus armas diplomáticas para luchar por el organismo por excelencia del turismo, uno de los sectores más importantes de nuestro PIB. Para el Ejecutivo de Sánchez, salvaguardar en Madrid la sede de la Organización Mundial del Turismo (OMT) y hacer olvidar a Arabia Saudí la idea de llevarse la sede a Riad, es uno de los objetivos más importantes ahora mismo. Una vez asimilada la sorpresa de los deseos de los árabes, que ya se transformó en miedo a perder la OMT, Madrid habría tenido reuniones bilaterales con otros países y con la propia OMT para evitar la pérdida.
El cambio de sede no es nada común en las instituciones de la ONU, y para lograrse, requeriría esa hipotética petición formal y que se llevara a votación en la asamblea general. El próximo encuentro de la asamblea, bianual, será en Marraquech, a mediados de octubre, pero podría aplazarse a final de año por la pandemia.
Si se lleva la propuesta de cambio de sede al orden del día de manera formal, los 159 países representados en la asamblea decidirán con su voto si hay mudanza o no, puesto que la sede de Madrid tampoco es que sea vitalicia. Arabia Saudí necesitaría dos tercios para lograr el traslado a Riad, o sea, convencer al menos a 106 países.
Arabia Saudí estaría desplegando poder económico y diplomático, ("comprando voluntades", según fuentes solventes, para arrebatar a Madrid la Organización Mundial del Turismo (OMT), única gran organización supranacional de Naciones Unidas que tiene su sede en España.
En lo que va de siglo, es la segunda vez que trasciende la amenaza de que la OMT abandone nuestro país. Una decisión que compete a Naciones Unidas (ONU), pero para la que es imprescindible el apoyo expreso (o la colaboración necesaria) del secretario general de la OMT. Hace casi dos décadas, el entonces secretario general Francesco Franguialli, apoyó las pretensiones de Canadá, impulsadas desde la capital francófono de Quebec, para arrebatar la sede a Madrid.
NEXOTUR se ha puesto en contacto con el ex secretario general de Turismo (actualmente miembro de honor del 'lobby' Mesa del Turismo de España), German Porras, quien ha analizado en detalle esta problemática. Porras, que fue también secretario general de la Mesa del Turismo, explica que "en el supuesto de consumarse, sería un auténtico desastre en términos diplomáticos, políticos, económicos y de imagen de país", además de perder "la única agencia del sistema de las Naciones Unidas que tiene su sede en España". Una que, explica, "que ha conseguido realizar una importantísima labor en su análisis económico y sociológico y ha sabido atender a las necesidades de los países en vías de desarrollo".
En cuanto a los factores que pueden llevar al abandono de España por parte de la OMT, Porras diferencia "dos tipos: externos e internos". En cuanto a los externos, subraya que "la sede de la OMT ha sido, desde que se estableció en España, objeto de deseo por parte de países con una ambiciosa política internacional, que buscaban una mayor presencia en el tablero mundial". Entre los factores internos, destaca que "el pretexto para plantear el abandono de España puede basarse en una inexplicable lentitud administrativa en resolver el problema logístico de dotar de unas nuevas instalaciones a la OMT, que resolverían las limitaciones actuales de espacio que padece la Organización".
Alertando sobre las consecuencias que esto supondría, el miembro de la Mesa del Turismo destaca que "España dejaría de ser el centro de atención de los países turísticos, tanto mercados emisores como receptivos, especialmente cuando algún factor relevante afecte al Turismo y se busquen estrategias para hacer frente a estos riegos".
En el aspecto diplomático, "la pérdida de la sede de la OMT reflejaría la debilidad de España en el panorama internacional y conllevaría una relevante pérdida de peso en la geopolítica mundial", añade, al tiempo en que advierte que, "en un momento en el que nuestra presencia en los foros internacionales es ya muy limitada, la pérdida de la OMT agravaría esta situación de inferioridad, que es el resultado de una falta de política sostenida en el tiempo para estar presente en los organismos internacionales".
Por su parte, el ex secretario general adjunto de la OMT y actual presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, ha asegurado a este medio que "La OMT es la única Organización que fue adscrita al sistema de la Organización Naciones Unidas y que tiene sede en España. Esto tiene un valor enorme porque basicamente le da la titularidad de ser la entidad rectora del Turismo a nivel mundial y concita la presencia de todos los estados que están adscritos al sistema de la ONU. Quizás, la OMT en su historia no ha logrado captar la participación de muchos países que sí participan en otras organizaciones de la ONU, como por ejemplo: la OMS, la FAO, la OMC o las organizaciones que tienen sede en Ginebra y en Viena que casi llegan siempre a la suma de 200 países adscritos".
"Como ex secretario general adjunto, desde el primer momento de la elección del actual secretario general, Zurab Pololikashvili, el Gobierno español reitero su promesa de entregarle a la OMT una serie de cosas, ya que la actual sede carece de los requisitos técnicos de seguridad y confortabilidad", ha explicado el ex secretario. "Estas promesas, conjuntamente con el Ayuntamiento de Madrid, lamentablemente no han ido a más, dada la burocracia y la falta de voluntad política y de compromiso real del Gobierno de España y, diría también en la época de la administración anterior del Ayuntamiento de Madrid. Por otra parte, es necesario anotar que Arabia Saudita ha dado pasos muy grandes y fuertes financiando y entregando recursos muy importantes a la Organización para tener sede alterna o regional para el Oriente Medio como la que se acaba de abrir. Tiene todos los recursos necesarios que, de alguna manera, enamoran al secretario general para pensar en una sede como esta. Hay que tener en cuenta que dejar ir de Europa la sede de la OMT sería una derrota enorme y, de ahí la importancia en que se deba trabajar intensamente para buscar una unidad con la Unión Europea (UE) para mantener la sede en Madrid", señala.
El alcalde de Madrid, mostró ante los miembros de la Mesa del Turismo de España, el pasado martes 20 de julio, su preocupación por esta posibilidad y reiteró su apuesta porque la Organización mantenga su sede en la capital de España. Por su parte, el ex director ejecutivo de la OMT, Carlos Vogeler, aunque prefiere no expresar su criterio al respecto, lamenta que "el simple hecho de que exista la posibilidad de que esto suceda es triste y preocupante".
Ante un eventual escenario tan preocupante, German Porras, cree que el Gobierno tiene dos frentes que atender para evitar esta pérdida. El primero es "resolver inmediatamente la asignación de la nueva sede física de la OMT, haciendo efectiva la decisión que se adoptó hace mucho tiempo de ceder parte del emblemático Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid, radicado en en el Paseo de la Castellana, para albergar a la Organización".
El segundo frente consistiría en "la correspondiente acción diplomática, teniendo en cuenta que Europa genera el 50% de la actividad turística mundial y existe un consenso sobre que la OMT tenga su sede en Europa". "La presencia de la OMT en España se consiguió en plena Guerra Fría y con un régimen político que no gozaba de muchas simpatías internacionales" (el Gobierno del General Franco), y "sería paradójico que, en la presente coyuntura, mucho más favorable internacionalmente, nuestra acción diplomática se saldara con un fracaso sin paliativos", concluye.