Asimismo, la cadena hotelera de la familia Escarrer pasará a denominarse a partir de ahora Meliá Hotels International, tras aprobar en junta de accionistas la modificación de su denominación social, que modifica el artículo 1 de los estatutos de la compañía. Durante su intervención, el presidente Gabriel Escarrer explicó que con este cambio la compañía busca adecuar su marca corporativa a la "estructuración real y diversa" de su cartera de establecimientos y dotar de "coherencia y competitividad" a sus marcas para afrontar la estrategia de expansión y diversificación global que la compañía quiere acometer.
De esta forma, Sol Meliá Hotels & Resort pasará a llamarse Meliá Hotels International, nueva marca corporativa que responde "al alto valor aportado por la marca más internacional del grupo, a su fiabilidad y al grado de reconocimiento y potencial en múltiples mercados". En el último trienio, la diversificación de la compañía ha supuesto que el resultado bruto de explotación (Ebitda) de Sol Meliá generado fuera de España pase del 57% al 77%, tendencia que continuará, explicó el directivo, mediante alianzas con empresas líderes locales.
En 2010, Sol Meliá ha desembarcado en China, con la apertura de un hotel en Shanghai, y en Dubai, y se ha adentrado en el mercado norteamericano al vender su marca Tryp, que sigue gestionando, al gigante hotelero americano Whydham. A esta estrategia se suma además su alianza con la primera cadena hotelera China, la corporación Jin Jiang International Hotel Company, para captar turistas chinos hacia Europa.
El crecimiento se llevará a cabo mediante fórmulas poco intensivas de capital (gestión, alquiler o franquicia), que representan el 86% de las incorporaciones pendientes. En esta línea, Escarrer se refirió al futuro de la cadena hotelera, que este año cumple 55 años, que girará en torno al nuevo Plan Estratégico 2010-2014 en el que ya trabaja, la renovación de la misión, cultura y valores corporativos, el refuerzo de las áreas de negocio de Asia-Pacífico y su nueva marca.
El presidente del grupo también hizo balance del trienio que acaba de finalizar, durante el cual la compañía hizo frente a la "peor crisis" que ha vivido el turismo, y en la que trató de hacer compatible mantener el negocio con los resultados a corto plazo y con la aplicación de medidas para fortalecer su posición a largo plazo. Para ello, aplicó un Plan de Contingencia, aunque el "salvavidas" del grupo fue su proceso de expansión internacional, con el que sumó 78 nuevos hoteles durante el periodo, para una oferta de 20.597 habitaciones. En 2010, la cadena consolidó la mejora de sus ingresos por habitación disponible (RevPar), con un 31,5% más en su beneficio neto del ejercicio.
Otros acuerdos de la junta
Por otro lado, la junta de accionistas ha autorizado al consejo de administración a acordar la ampliación de capital de la sociedad, hasta un máximo de 18,4 millones de euros, pudiendo ejercitar dicha facultad dentro de este importe en una o varias veces, así como la cuantía y condiciones. La ampliación que, en su caso, se acuerde, deberá realizarse dentro de un plazo máximo de cinco años desde hoy.
Además, el consejo de administración tiene la facultad de emitir valores de renta fija, convertibles y/o canjeables, dentro de un plazo máximo de cinco años desde el acuerdo, con atribución de excluir el derecho de suscripción preferente de los accionistas y obligacionistas, de garantizar las emisiones de sociedades filiales y de ampliación de capital en la cuantía necesaria.
Asimismo, se ha ratificado el nombramiento de Luis María Díaz de Bustamante como consejero independiente para sustituir la vacante creada por el fallecimiento de José María Lafuente López. Finalmente, la junta de accionistas de la hotelera ha aprobado además las cuentas anuales del 2010, que cerró con unas ganancias de 50,1 millones de euros, lo que representa una mejora del 31,4% con respecto al ejercicio anterior.
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