Sobre estos datos, el consejero delegado de Thomas Cook, Manny Fontenla-Novoa, afirma que "estamos contentos con los resultados de este primer trimestre, que establecen una sólida base para el resto del año". En este sentido, este es uno de los motivos por el que desde el grupo británico destacan que "la flexibilidad" con la que operan, su "habilidad para adaptarse a los cambios de la demanda y de los costes", hace pensar que "se cumplirán las previsiones económicas previstas por el equipo directivo para este año".
Por otro lado, "los resultados previstos para el invierno 2008-2009 siguen siendo sólidos", apunta Fontenla-Novoa. Asimismo, asegura que "en todos los mercados los precios son más elevados que los del año pasado y los factores de carga en los vuelos se encuentran al mismo nivel". Al respecto, el consejero señala que "las reservas también están en línea con la reducción que se ha hecho de la capacidad", excepto en el norte de Europa, "donde el impacto de la celebración más tardía de la Semana Santa se ha dejado notar". Para el verano de 2009, añade, "en el Reino Unido ya hemos vendido el 43% de la capacidad disponible, pero en el resto de nuestros principales mercados todavía es pronto".
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