No obstante, apuntan que "aún es necesario" que sean las propias aerolíneas las que decidan si desean autorizar a Marsans a que venda sus billetes a través del sistema BSP de IATA. Por su parte, los propietarios del grupo han anunciado que tras depositar el aval necesario, ahora están negociando con las compañías aéreas soluciones para solucionar las deudas pendientes.
Los trabajadores de Marsans han calificado el pago del aval y de la deuda de Viajes Atenea como "un lavado de imagen". Pese a considerar que la recuperación de las licencias IATA es una "noticia positiva", aseguran que "no sirve de nada" si no se logra recuperar la actividad de la agencia de viajes con otras actuaciones. Así, insisten en la necesidad de establecer acuerdos con las aerolíneas para poder reanudar la venta de billetes, pues son éstas las que deben otorgar el permiso necesario para ello. "Este golpe de efecto podría ser únicamente una cortina de humo" por parte de los nuevos dueños del grupo, aseguran.
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