No obstante, pese a los efectos comparativos de la ceniza, los mercados de pasajeros habrían alcanzado en abril un nivel un 7% superior que los picos anteriores a la recesión en 2008. A escala internacional, la capacidad ha aumentado un 16,8%, mientras que el factor de ocupación de los vuelos ha descendido en 0,1 puntos porcentuales hasta el 76,7%. En cuanto al tráfico doméstico, éste ha aumentado un 4,7% en abril con respecto al año anterior con un aumento de capacidad del 3,1% y un factor de ocupación del 78,8%.
"La demanda mejoró de manera significativa en abril", ha destacado el consejero delegado de IATA, Giovanni Bisigniani, subrayando que la confianza de la industria es "alta" en estos momentos, aunque ha lamentado que los shocks de la demanda y los elevados precios del crudo estén enturbiando este buen momento. También ha recordado que a pesar de la enorme reestructuración del sector durante la pasada década, la industria aún es vulnerable a los shocks de la demanda por crisis como la inestabilidad geopolítica de Oriente Próximo y Norte de África o el terremoto de Japón.










