El premio fue recogido por el director general del hotel, Gilees Cretallaz, en la ceremonia que se celebró el 14 de septiembre en Hong Kong. "Estamos muy orgullosos de alcanzar esta posición de líder, que es el resultado de un trabajo duro, del espíritu de equipo de todo el staff y por supuesto de nuestra meticulosa atención por mantener los estándares más altos posibles en lo que a confort y servicio a nuestros clientes se refiere", señala Cretallaz.
El hotel fue construido en 1901 y se consolidó hasta los años 30 como el más exquisito de los palacios occidentales del Extremo-Oriente. Volvió a abrir sus puertas en 1992 tras su restauración, convirtiéndose desde su reapertura en punto de descanso de escritores y autoridades políticas de todo el mundo. Ha sido distinguido en otras ocasiones como uno de los 500 mejores hoteles del mundo, según el criterio de la revista Travel & Leisure.








