Así lo ha anunciado la nueva asociación explicando que en los últimos diez años la organización de eventos ha experimentado un "extraordinario desarrollo, sin embargo, este crecimiento ha generado también un crecimiento desordenado". Por eso, frente a organizadores con una trayectoria profesional sólida, señalan que han crecido multitud de empresas con una "dudosa profesionalidad y solvencia".
En ese sentido, la nueva asociación se marca como objetivos participar en la profesionalización del Sector, apoyar la formación profesional, crear un código de conducta y promocionar Extremadura como destino de negocios. "La asociación representa un compromiso firme hacia la calidad por parte de las empresas que la componen", señalan.
Así, y "en un mercado en el cual la ética profesional, la buena gestión de concursos, la protección de creatividad son preocupaciones clave", Extremadura OPC pretende "crear un comité para el autocontrol de la actividad profesional que pueda evaluar posibles infracciones y denunciar públicamente prácticas no ajustadas a la conducta propuesta".
Código de conducta
La asociación también señala que una de sus primeras misiones es crear un código de conducta "que permita favorecer ciertas prácticas profesionales como la competencia leal, el respeto entre los miembros y la información de las presentaciones a concursos". Es decir, "la creación de pautas de comportamiento profesional que redunden en una mejora, tanto para los clientes como para las agencias".
Esta iniciativa es "sin duda la reacción al mercado que conocemos, un mercado con pocas normas, en el cual muchos tipos de actores organizan eventos, con más o menos estructura, con más o menos especialización, con más o menos experiencia", y en el cual "el cliente acaba a menudo perdido y sin base para seleccionar sus agencias". Es así como la asociación pretende que el cliente tenga una base de agencias de organización integral de eventos, entre la que pueda elegir.
Finalmente, Extremadura OPC destaca la "importancia" del turismo de negocios en Extremadura, ya que gasta, según datos del Spain Convention Bureau (SCB), el triple que el turista cultural o de ocio.









