Las nuevas conexiones de Ryanair se unirán a las 30 que ya opera desde Palma de Mallorca, saliendo a la venta a partir de hoy. El establecimiento de su base en Palma se debe, según O’Leary, a que tras cuatro años en Alicante Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) les "ha impuesto el uso de las pasarelas con un coste de dos millones de euros extra, lo que supone un incumplimiento del acuerdo original". Por ello, la aerolínea irlandesa ha decidido que "cuatro de los seis aviones que tenían base ahí se trasladan a Mallorca".
O’Leary señala que su objetivo es ser la compañía aérea "con los costes más bajos" y que no le preocupan las críticas a su empresa, "ya que esto supone que la gente hable, ya sea para mal o para bien". Según ha asegurado, uno de los males del Turismo español "es el monopolio de AENA, ya que romperlo supondría la disminución del coste de trámites y en consecuencia, el aumento del empleo".










