Pues no faltaba más. Ahora resulta que las empresas de transporte a las que las distintas Administraciones les adeudan cerca de 1.100 millones de euros (el 29% de la facturación total del Sector), están viendo como se les "sugiere" que acepten determinados porcentajes de quitas para que el pago de la deuda contraída se agilice. Es como si a uno le "obligasen" a aceptar sustanciosos descuentos para cobrar una factura por un trabajo ya realizado, y sin previo aviso. Menos mal que Asintra y Fenebus han tomado la iniciativa, con sendas cartas a los Ministerios de Hacienda y Fomento, anunciando su negativa a negociar quitas, dado que la precariedad económica de los empresarios no permite acciones de este tipo.
