La intención de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) de imponer una liquidación semanal a las agencias de viajes para minimizar el riesgo de defaults ha reabierto viejas heridas. Las Organizaciones empresariales más representativas del Sector, FEAAV y AEDAVE, han clamado contra la propuesta de IATA-España, denunciando el abuso de "su posición de dominio", y advirtiendo de que podrían llevar a cabo acciones legales para acabar con "un contrato impositivo".
En respuesta a estas declaraciones, el director general de IATA-España, Juan Carlos Odelé, ha defendido la "transparencia tanto del contrato de agencias como del programa de agencias de pasaje", asegurando que "se basan en procesos de consulta permanentes con las Asociaciones y las compañías aéreas a través de foros como el APJC". Odelé también recuerda que "existe la figura del Travel Agency Comissioner, árbitro independiente cuyo coste asume IATA, para mediar en caso de conflicto en la aplicación de una resolución".
El sistema BSP ‘es voluntario’
Asimismo, el director general de IATA-España señala que sin la intermediación de IATA "la venta de billetes resultaría mucho más compleja y muchas agencias de viajes no podrían tener acceso a tanto producto aéreo". En esta línea, apunta que al igual que las aerolíneas tienen varios canales de distribución, las agencias "pueden elegir si intermedian en la venta de billetes de una compañía aérea e incluso pueden utilizar consolidadores para emitir billetes si no les resulta beneficioso ser agentes IATA".
Finalmente, Odelé, que recuerda que el sistema BSP da acceso al inventario de más de 150 aerolíneas, explica que "es sólo una modalidad entre otras de comercializar pasajes de avión y es voluntario". "Adicionalmente, el éxito del BSP en el mundo demuestra su valor para todos los participantes, y no que haya ningún abuso de posición dominante por parte de IATA", sentencia.









