Los recortes del Gobierno Rajoy, pese al fin de la crisis financiera, se mantienen. Y con ellos la amenaza real de que el Sector pierda lo que había logrado en tres aspectos claves para nuestra competitividad: calidad, innovación y tecnología. Un desatino que sorprende, por cuanto calidad e innovación son dos de las escasas competencias (con la promoción e internacionalización), que
conserva la Secretaría de Estado de Turismo. Máxime cuando la promoción de la Q de Calidad Turística, que es lo que reclama el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), afecta a una marca propiedad de la propia Secretaría de Estado, y el ICTE es un organismo que reúne a todo el Empresariado sectorial y realiza una actividad verdaderamente encomiable.
La Calidad y el I+D+i sectoriales corren peligro de morir de inanición
Al igual que ocurre con otro milagro sectorial, como es el
Instituto Tecnológico Hotelero (ITH), impulsado por la Confederación Española de Hoteles, que suple las carencias en I+D+i de muchos establecimientos independientes y de pymes de alojamiento, mediante este caso excepcional de departamento colectivo de I+D+i hotelero que es el ITH.
"Nuestra labor ha sido y es fundamental",
subraya el presidente del ICTE, Miguel Mirones, "y esperamos que lo siga siendo en el futuro". El ICTE solicita al Gobierno central "mayor apoyo presupuestario, porque en el fondo", apunta Mirones, "
estamos hablando de promover la marca España".
De hecho, la marca Q de Calidad Turística ha vivido una
expansión espectacular bajo la presidencia de Mirones en el ICTE, cargo al que accedió en 2003 por acuerdo unánime de las grandes Organizaciones empresariales. A lo largo de estos años, pese a la incidencia de la crisis económica, más de 5.000 empresas españolas han logrado la certificación. Todo un hito que impregna al Sector Turístico de una cultura de Calidad.
"Nuestra labor ha sido y es fundamental, y esperamos que lo siga siendo en el futuro", resalta Mirones, quien hace hincapié en que "con la recuperación de otros destinos que hasta ahora estaban inmersos en una cierta inestabilidad política, es necesario ofrecer algo más que buenos precios: el camino es la búsqueda de la calidad", porque gracias a la calidad turística "podemos ser más competitivos que otros destinos".
Pese al incuestionable éxito de la marca Q de Calidad, para el ICTE
es esencial que desde las Administraciones públicas haya un compromiso para fomentarla, que se tiene que traducir en un mayor apoyo presupuestario, porque en el fondo estamos hablando de marca España.
ITH e ICTE son dos instrumentos fundamentales en la mejora continua y la innovación sectorial o, lo que es lo mismo, del Turismo en España. Son dos herramientas eficaces, gestionadas por el propio Sector, que suplen unas competencias que corresponden a nuestras Administraciones turísticas, pero que necesitan de su apoyo. ¿Se lo prestará el nuevo gobierno socialista de Sánchez?
Que le sea útil. Ese es nuestro mayor interés.