La crisis económica
ha traído consigo cambios en el tejido empresarial en el Sector de agencias de viajes en España. Aunque la atomización, característica intrínseca del negocio, sigue existiendo, se observa una
creciente concentración en torno a las marcas más potentes. Detrás de esta tendencia está el
cierre masivo de las empresas de menor tamaño, así como el avance de las grandes redes vía adquisiciones o mediante la
captación de independientes bajo la fórmula de franquicias o asociadas.
El número de agencias con un único punto de venta retrocede un 23%
A pesar de que la coyuntura económica adversa, unida a otros factores, se ha llevado por delante a algunas de las que fueran de las más importantes redes del país, como es el caso de Vibo (Viajes Iberia) y Viajes Marsans, se ha cebado con especial virulencia con las pequeñas. Según los datos recabados por Amadeus y la Asociación Catalana de Agencias de Viajes Especializadas (ACAVE), en el año 2009 había un total de 3.960 agencias con un único punto de venta. Dicho modelo de negocio ha sufrido un retroceso del 22,7% en ocho años, cerrándose 2017 con 3.060 agencias de estas características.
Mayor aún es el descenso de empresas con dos puntos de venta. Pasan de ser 825 en 2009 a 585 en 2017, lo que supone una caída del 29%. Todo lo contrario sucede con las sociedades que disponen de más de dos oficinas. Experimentan en el periodo analizado un crecimiento del 19,8%, pasando de ser 715 a 855. Además, su peso sobre el total sube seis puntos porcentuales, representando el 19% de las agencias de viajes de España.
Cada vez hay mayor número de empleados por agencias
Si se analiza la evolución
en función del número de empleados, las diferencias son aún más llamativas. Llama especialmente la atención que las agencias con un único empleado se han desplomado (-72%), pasando de 1.155 empresas de 2009 a 315 al cierre de 2017. También se produce un drástico descenso del 56% del número de empresas con dos trabajadores, que pasan de 1.760 a 765. En el lado opuesto están las agencias con más de cinco empleados, que crecen un 68%, pasando de ser 1.100 en 2009 a 1.845 en 2017. Las de entre tres y cinco trabajadores también experimentan una subida del 6%, concluyendo el mencionado año con 1.485 ocupados.
En términos de facturación,
el 58% de los puntos de venta declara vender más de un millón de euros al año. Le siguen los que facturan menos de 300.000 euros anuales, que representan el 16% de las oficinas. Aquellas con un volumen de entre 600.000 y un millón de euros concentran el 15%, mientras que las de entre 300.000 y 600.000 tienen un peso del 11%.