Pero sin duda, en 2016/2017, el punto de inflexión en cuanto al incremento de turistas chinos viajando a España (de un 125% según Ctrip.com), ha sido la mejora de la conectividad aérea, pasando de sólo dos rutas directas a ocho.
Sin embargo, estas cifras aún nos distancian de los principales aeropuertos europeos. Barajas, con más de 53 millones de pasajeros, es el quinto más importante de Europa, pero en cuanto a la procedencia de la demanda existen grandes diferencias entre los principales aeropuertos nacionales y el resto de europeos.
El mercado nacional sigue siendo el principal activo de los aeropuertos españoles. También se identifica una gran diferencia en el caso de estos aeropuertos en la proporción de los pasajeros procedentes de fuera de la UE, encontrándose a gran distancia del resto de aeropuertos de Europa. La escasísima conectividad queda patente sobre todo, en los mercados asiáticos (China, Corea del Sur o Japón). En el caso de China: ocho vuelos directos, 25 vuelos semanales, a través de seis compañías a marzo de 2018.
Frente a los más de 6.200 vuelos anuales de Frankfurt o los casi 8.000 vuelos entre Charles de Gaulle y China, Madrid apenas llegaba al millar en 2016. Situación más dramática, si analizamos el caso de Japón con sólo 66 vuelos.
Según TurEspaña en 2017 nos visitaron 514 mil turistas chinos, un +37,1% respecto al año anterior, este crecimiento directamente relacionado con la mejora de la conectividad supuso un mayor gasto (+18,1%), así como un incremento de las pernoctaciones hoteleras (+28%). Además, según AENA, entre abril y junio 2018 las reservas en los vuelos previstos aumentarán un 32,7%. En conclusión, sigamos fomentando la generación de nueva rutas, ya que queda patente, que el aumento en las plazas aéreas va en paralelo al incremento en la llegada de visitantes del país asiático a España.