Para ello, el ITH ha organizado el segundo ciclo de Jornadas sobre Seguridad Digital en Hoteles, que comienzan en Palma de Mallorca el próximo 26 de abril, y que abordará temáticas como infraestructuras y sistemas, dispositivos, domótica e IoT, transacciones y gestión de datos; contarán con la participación de Nethits Telecom Group, HP Ibérica, Jung Ibérica, Accenture, Serban Biometrics y Sipay. En él se aportará a los hoteleros una visión global sobre los posibles riesgos y medidas preventivas que deberían considerar implementar en la gestión diaria de sus negocios.
El 67,3% de los incidentes son por un ataque con malware malicioso, el 14,9% accesos no autorizados y el 10,7% fraudes
La situación se agrava con el paso de los años, pues así lo ponen de manifiesto las cifras registradas de forma anual por el Instituto Nacional de Ciberseguridad del Ministerio del Interior (Incibe), según las que la evolución de los incidentes en infraestructuras no críticas ha pasado de 18.000 en el año 2014 hasta los 120.000 del año 2017.
Además, el sector turístico se ha convertido en el tercer objetivo de la ciberdelicuencia, no solamente por la cantidad y tipología de datos que maneja, sino además por la amplitud de interconexiones con sistemas terceros (pasarelas de pago, gestores de reservas…) que abren posibles puertas de entrada, diversificando además las áreas de negocio que se pueden ver afectadas por una incidencia de seguridad y que, posteriormente, podría llegar a expandirse y afectar a todo el establecimiento.
Según apunta la responsable de Innovación de ITH, Patricia Miralles, “el avance hacia la transformación digital que supone la incorporación de tecnología al negocio debe ir acompañada de una inversión en seguridad, teniendo en cuenta siempre que la seguridad total no existe”.
Tipos de ataques
Los métodos de ataque también se han diversificado a lo largo de los últimos años, siendo los más utilizados la infección de equipos a través de programas maliciosos que pueden dañar el sistema o dispositivo (malware) con un 67,3%, seguido de accesos no autorizados con un 14,9% y fraudes con un 10,7%. Completan la clasificación, el spam malicioso que sigue con vida en la red gracias a la ingeniería social, las denegaciones de servicio, los escaneos de redes y sistemas y los intentos de robo de información, según el estudio de Incibe.