Los gastos comerciales de International Airlines Group (IAG) se disparan en 2017 por, entre otros motivos, la puesta en marcha de su nuevo modelo de distribución. Según detalla el propio grupo en su informe de resultados anuales, ha destinado a esta partida un total de 982 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,6% (un 11,8% excluyendo los efectos cambiarios) en comparación con los 896 millones que desembolsó en 2016.
De este incremento, alrededor de cuatro puntos porcentuales (lo que vendrían a ser 34,8 millones de euros) corresponden al sobrecoste generado por la nueva estrategia de distribución, que según IAG "elevó tanto los gastos como los ingresos y, al mismo tiempo, permitió al grupo dar acceso más directo al cliente". Los gastos comerciales también han crecido por "el aumento de las reservas de los pasajeros y por las iniciativas de marketing, como el 90º aniversario de Iberia", añade.
Penalización a los GDS
Dentro de esta nueva estrategia de distribución, el cambio más notorio, y a la vez más polémico, ha sido la
imposición de un recargo de 9,5 euros por cada componente de tarifa de Iberia y British Airways reservado a través de un GDS, medida que ha despertado el
rechazo tanto de las agencias de viajes como de los grandes proveedores tecnológicos. Junto a esta penalización, que entró en vigor el pasado 1 de noviembre,
IAG lleva meses trabajando a marchas forzadas en el desarrollo de canales alternativos para las agencias de viajes, como un nuevo ‘portal’, así como en la implementación de conexiones basadas en el nuevo protocolo New Distribution Capability (NDC).