Todo el Sector Turístico ha sumado sus fuerzas para dar la batalla en Bruselas y que la Comisión Europea respete el IVA reducido para el Turismo. Pero tener la razón (España no puede competir con el IVA hostelero de Francia, o la ausencia de este impuesto entre sus competidores del Mediterráneo), e incluso contar con lobbies eficaces en Bruselas, no es suficiente. El Gobierno de Rajoy debe defender la primera actividad económica, y el IVA turístico es esencial.