El grupo sigue dando muestras de su solidez y gana un 20% más
Según detalla, el resultado del referéndum británico provocó incertidumbre económica, mientras que las aerolíneas de IAG se enfrentaron a condiciones de mercado difíciles en las fechas anteriores y posteriores al mismo, especialmente en las cabinas premium. Además, su resultado ha provocado un debilitamiento de la libra esterlina, afectando a la conversión de las cifras de las filiales del grupo que operan en esta moneda y, por tanto, reduciendo los beneficios. Su consejero delegado, Willie Walsh, reconoce que, "aunque el desempeño fue sólido", los resultados "se vieron afectados por un difícil entorno operativo, con un impacto negativo de los tipos de cambio muy significativo de 162 millones de euros".
Todavía no hay cambios regulatorios por el Brexit
No obstante, destaca que tras la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea, "
no se ha producido ningún cambio regulatorio que afecte a la capacidad del grupo para desarrollar su negocio de forma eficaz o a su estructura regulatoria". "Los términos de la salida todavía no se han negociado", añade.
A pesar del empeoramiento del entorno operativo y de mercado, IAG camina con paso firme y cierra los nueve primeros meses de 2016 con
un beneficio neto de 1.484 millones de euros, un 20,1% más que en el mismo periodo de 2015. Sus ingresos ascienden a
17.272 millones, un 0,9% más, mientras que su beneficio operativo también crece un 6,1%, hasta 1.942 millones.
En lo que respecta al tercer trimestre, tanto los ingresos como el beneficio operativo sufren descensos del 3,6% (1.153 millones) y del 4% (6.486 millones), respectivamente. La ganancia neta del grupo aumenta un 9,9%, situándose en 930 millones.