El prestigiado galardón, que concede la Cámara de Comercio de Estados Unidos y España, distingue a los grandes líderes empresariales que han realizado una contribución significativa al crecimiento económico de España o de Estados Unidos y a la mejora de las relaciones empresariales entre ambos países. La Cámara de Comercio EspañaEstados Unidos fue fundada en Nueva York en 1959 y está dedicada a impulsar las relaciones económicas entre ambos países, siendo una de las prestigiadas organizaciones transatlánticas de negocios.
Hidalgo recibe así un nuevo reconocimiento a su excepcional trayectoria —que suma a la concesión de las Medallas al Trabajo o al Mérito Turístico, que le han sido otorgadas por diferentes Gobiernos—, construyendo desde la nada el primer grupo turístico español. Desde Estados Unidos se reconoce a un empresario "hecho a sí mismo". Una figura muy estimada en Norteamérica, que valora a aquellos que son capaces de construir grandes obras por sí mismos.
Y es que, mientras en Estados Unidos el mérito de un empresario como Juan José Hidalgo le habría llevado a ser portada de las grandes revistas, siendo considerado una figura nacional, en España se denosta a quien tiene éxito.
En nuestro país muchos desconfían de quien triunfa por sí mismo sin tener pedigree familiar
En nuestro país muchos desconfían de quien triunfa por sí mismo sin tener pedigree familiar, hasta el punto de considerársele como sospechoso, mientras se protege a quien lo logra gracias a sus apellidos, o por herencia. Hidalgo ha cometido la osadía de generar una alternativa real al transporte aéreo... y eso se paga. Por ejemplo, siendo el objetivo de una guerra sucia, impulsada por medios que hacen del chantaje y la extorsión su argumento de venta publicitaria.
Injuriar al primer agente de viajes español, acusándole de estafa (sin que se haya pronunciado un juez) no es solo una injusticia, es delito de difamación.
NEXOTUR está a favor del agente de viajes. De todos los agentes. No de unos sí y otros no. Y, por tanto, no será este periódico quien alimente guerras entre agentes. Máxime cuando la munición utilizada es el insulto, la injuria y la insidia, deslizadas de manera tan interesada como cobarde y desde el anonimato, sirviéndose de infumables comentarios del lector en medios digitales.
Precisamente ahora, cuando la guerra sucia desatada a raíz de la pugna por el Imserso (donde a la competencia, siempre sana, se han unido la envidia, el ajuste de cuentas y la maledicencia), es de justicia reivindicar a un gran empresario como Pepe Hidalgo, que es (o debiera ser) un "patrimonio nacional" del que nos sintamos orgullosos (como ocurre en Estados Unidos), al igual que de nuestro primer grupo turístico ...y dejar a la Justicia que haga su trabajo.
Que le sea útil. Ese es nuestro mayor interés.
