Destinia estudia la posibilidad de dejar de vender billetes de las aerolíneas pertenecientes al Grupo Lufthansa (Lufthansa, Austrian Airlines, Brussels Airlines y Swiss) ante su decisión de aplicar un recargo a las reservas realizadas a través de GDS. La agencia online critica que la web específica del grupo aéreo solamente permite a los agentes hacer reservas de manera manual, lo que limita y encarece la operativa cotidiana al no ser un proceso automatizado.
Al no existir una plataforma para una integración online, Destinia solo podrá "mostrar los precios de Lufthansa con una penalización de 16 euros, lo que reduce la capacidad de elección de nuestros clientes y es un claro intento de expulsarnos del mercado", denuncia su consejero delegado, Amuda Goueli. En esta línea, explica que si la intención es crear a medio plazo una plataforma para trabajar con las agencias, integrarla "llevará meses de trabajo de programación".
Bruselas ‘debería estar muy atento’
Goueli afirma que dicha labor "no solo implica costes que tendremos que asumir, sino que muchas pequeñas agencias no tendrán capacidad ni medios para hacerlo". "Hay que tener en cuenta que Destinia, por ejemplo, trabaja con 600 aerolíneas, por lo que si cada una decidiera imponer su propio sistema constituiría una operativa muy costosa de mantener", añade.
El directivo aclara que "esta batalla con Amadeus no es nueva". "American Airlines ya hizo una estrategia similar en 2010, tratando de redirigir el mayor número de ventas a su canal directo y presionar a los GDS a negociar", recuerda, por lo que esperará a "ver cómo termina este pulso antes de tomar una decisión final".
Goueli también alerta de que "si más aerolíneas siguieran esta senda, sería perjudicial para la competencia del sector". Por todo ello, considera que "Bruselas debería estar muy atento a lo que suceda".