Tras años de crecimiento mediante apertura de oficinas propias, la crisis económica, con la consecuente caída del consumo, ha llevado a las grandes redes de agencias a replantear sus estrategias y readaptar sus estructuras. Así, la gran mayoría están apostando por crecer únicamente mediante la fórmula franquicia, lo que, sumado a la fortaleza de grandes marcas que se dedican únicamente a este negocio (como Viajes Carrefour y Zafiro Tours), ha provocado un aumento exponencial del número de puntos de venta bajo este modelo.
Grosso modo, cuatro empresas tienen un claro dominio en la fórmula franquicia, copando entre ellas cerca de 1.700 oficinas. A la cabeza se encuentra Viajes Carrefour con unos 600 puntos de venta, seguida de Zafiro Tours con en torno a 480. Mientras tanto, dos de las tres redes más importantes del país, como son Halcón-Ecuador y Barceló Viajes, cuentan con unas 450 y 160 franquiciados, respectivamente.
Asimismo, como adelantó en exclusiva NEXOTUR, Nautalia Viajes "está diseñando las herramientas tecnológicas necesarias" para entrar en el sector de las franquicias. Según revela su director general, Rafael Montoro, la agencia de viajes, que suma en la actualidad más de 200 puntos de venta en España, pretende que esta fórmula represente el 50% de su red, y previsiblemente iniciará su andadura a finales de verano.
¿Cómo afecta la política de captación de agencias a los Grupos comerciales?
Si bien puede pensarse que la fórmula franquicia estaría arrebatando cuota de mercado a los Grupos comerciales, los responsables de estos últimos desmienten esta teoría, asegurando que la mayor parte de sus bajas se debe a cierres y cambios a otros Grupos comerciales. "Lógicamente que nos afecta en la captación de nuevas agencias, pues además son competidores con más recursos económicos, pero los costes que tienen que pagar las agencias que se incorporan a la mayoría de las franquicias son muy superiores a los que aplicamos los Grupos comerciales", explica el presidente ejecutivo de Gea, Prisciliano Fernández.
Además, recuerda que "con las franquicias, las agencias pierden su independencia de elección de proveedores, pues se ven obligadas a vender aquellos productos que les producen más rentabilidad, y en la mayoría de los casos no participan en el abono de los rapeles". Fernández también hace hincapié en que "nosotros damos un trato más personalizado e incluso hasta más garantías de futuro".
En los mismos términos se expresa el presidente de Ceus y consejero delegado del Grupo Star, Agustín Lamana, quien afirma "no tener miedo" a la proliferación de la fórmula franquicia. En su defensa, expone que "con los Grupos comerciales las agencias se benefician de todo", mientras que en las páginas web de las franquicias "redirigen las ventas a la propia empresa matriz". A su juicio, "la franquicia la veo más para agencias nuevas o gente que quiere introducirse en el negocio sin contar con experiencia suficiente". Al respecto, Lamana revela que "en Star exigimos un mínimo de tres años de actividad para unirse a nuestro proyecto".
Lo mismo opina el presidente de Avasa, Luis Felipe Antoja, quien señala que esta fórmula se adapta mejor "a las necesidades de las agencias que acaban de nacer", mientras que "la que lleva mucho tiempo en el mercado no suele abandonar su marca". Así, asegura que "a nosotros no nos afecta la estrategia de captación de las franquicias", y calcula que "hemos perdido una o dos agencias por este motivo en los últimos tres años".