Meliá obtuvo 8,2 millones de euros entre enero y marzo de 2014, lo que representa un incremento del 99% respecto al mismo periodo de 2013. Los ingresos alcanzaron los 316 millones, un 12% más que el año anterior, y el Ebitda sin plusvalías por la venta de activos se incrementó un 22%, lo que llevó a una importante mejora de la rentabilidad, al incrementarse los márgenes de Ebitda hotelero en 136 puntos básicos.
La evolución del negocio global – con mejoras en todas las regiones- es acorde con la tendencia positiva del turismo a nivel internacional, y particularmente en España, donde a la excepcional evolución que ha venido mostrando el segmento vacacional – vinculado a la demanda extranjera- se ha sumado el cambio de tendencia, tras varios años en negativo, de la demanda de los hoteles urbanos en España, dependientes del consumo doméstico, privado y de negocios.
En cuanto a las perspectivas, en conjunto y para todo el portfolio, la compañía espera un crecimiento del RevPAR de un dígito medio-alto, explicado en más del 50% por incrementos de precio.