Así se manifiesta Antonio Gil ante las declaraciones del que fuera secretario general de Turismo (2003-2004), Germán Porras, publicadas en CONEXO en un artículo el pasado lunes, 14 de abril, en las que confirma que existía un proyecto para destinar parte de las instalaciones del Palacio de Congresos de Madrid a la sede de SGT. Este proyecto finalmente no se llevó a cabo, asevera Porras, por "la conjunción de factores e intereses particulares, apoyados por algún representante de los sectores hotelero y OPC Madrid".
El actual presidente de la AEHM —y entonces secretario general de la asociación— asegura que la defensa de los hoteleros no respondía entonces ni lo hace ahora a ningún interés particular sino que se hace en favor de todo el sector turístico de la capital. "Disponer de un magnífico palacio de congresos en el centro de la ciudad rodeado de más de 10.000 plazas hoteleras de primer nivel, es un auténtico lujo para Madrid que envidiaría cualquier otra ciudad del mundo", comenta Gil. Además, denuncia que "haberlo mantenido en penosas condiciones tras el incendio o tenerlo ahora totalmente cerrado sin fecha prevista para su apertura, es una muestra clara de que el Gobierno de un país que depende del turismo, no entiende la importancia del turismo de negocios y los retornos que produce invertir en él".
Ante esta situación, "los hoteleros madrileños pedimos una urgente reapertura del Palacio de Congresos de Madrid, debidamente rehabilitado, y sin merma alguna de su capacidad inicial", concluye Antonio Gil.
Más oposición al proyecto
El Periódico CONEXO publicaba en el año 2004 varias declaraciones de profesionales del sector turístico y de la Administración local oponiéndose al proyecto que lideraba Germán Porras. Por ejemplo, el entonces presidente de la AEHM, Jesús Gatell, destacaba que "es inadecuado que TurEspaña instale sus oficinas en el palacio, porque se trata de un espacio único para la actividad para la que fue concebido, dada su situación en la capital". "La Administración central no ha demostrado mucho interés por el Palacio de Congresos de Castellana. Si el Estado no sabe qué hacer con él, que los transfiera a la Comunidad de Madrid", sugería Gatell.
Por su parte, la que fuera presidenta del Patronato de Turismo de Madrid y concejala de Economía, Pilar Martínez, aseguraba que "nuestra postura fue muy clara desde el principio a favor de que el palacio estuviera íntegramente dedicado a la actividad congresual". Y criticaba la insistencia de TurEspaña en llevar a cabo el traslado de sus oficinas a Castellana, "cuando desde hacía tiempo, tanto los hoteleros como los organizadores de congresos y el propio Consistorio municipal le venía diciendo que no era una buena idea".
Por último, el entonces presidente de OPC Madrid y posterior presidente de OPC España, Julio Abreu, se oponía al proyecto al mermar la capacidad de la instalación, y por ende de la ciudad de Madrid, de captar eventos. Y ponía un ejemplo muy gráfico, si los empleados de TurEspaña se hubiera trasladado al palacio, "éste se quedará sin plazas de aparcamiento para los participantes en los congresos y reuniones". Abreu, tras conocer que finalmente no se iba a desarrollar el proyecto, afirmaba que "la decisión de abandonar el proyecto de las oficinas es algo que alegra a todo el Sector". También lamentaba que la polémica hubiera costado el puesto de director del palacio a Fernando Puig de la Bellacasa. "Se quedó en el camino de la negociación y eso supone una gran pérdida, ya que es una persona que conoce muy bien el Sector y que realizó una gran labor al frente del palacio", aseguraba Abreu.