Concretamente, Europair destaca cinco argumentos clave a favor de fletar un avión privado, ya sea un jet privado para dos personas o un avión de más de 400 plazas. El primero de ellos es el ahorro de tiempo: el cliente puede diseñar el itinerario más directo (no sólo a la ciudad de destino sino también al aeropuerto más próximo) y elegir los horarios más convenientes, lo que le evita posibles esperas para conexiones así como pernoctas innecesarias.
El segundo, una mayor eficiencia: el tiempo es oro, por lo que ahorrando tiempo también se suelen optimizar los costes. Varios estudios demuestran que el hecho de elegir opciones de viaje en vuelos regulares aparentemente más asequibles afecta negativamente la productividad de los viajeros porque, al estar obligados a cumplir con unos horarios de vuelo inflexibles, se dilatan las horas de viaje y, a menudo, resulta necesario sufragar también pernoctaciones hoteleras. Así, los costes finales del viaje en cuestión acaban aumentando de manera significativa, especialmente en el caso de los directivos, cuyo ratio de horas de trabajo/salario es más elevada.
El tercero es un control total: contratando un servicio de aviación ejecutiva, el cliente no sólo sabe en todo momento quiénes son sus compañeros de viaje, también se asegura de que los aviones y sus tripulaciones cumplen los máximos estándares de calidad, un aspecto particularmente relevante cuando se viaja a determinadas zonas geográficas en las que surgen dudas razonables acerca de la fiabilidad de los operadores locales y el mantenimiento de sus flotas.
Privacidad y flexibilidad
El cuarto argumento es la privacidad: desplazarse en un avión privado no sólo ofrece más comodidad y ahorro de tiempo, también ofrece la máxima privacidad y confidencialidad para las conversaciones de negocios, por lo que se pueden aprovechar las horas de vuelo para mantener encuentros de trabajo con las mismas garantías que en la sala de reuniones de la sede corporativa.
Y el quinto es la flexibilidad: la aviación ejecutiva ofrece a sus clientes una extraordinaria adaptabilidad a posibles cambios en el programa previsto, lo que de nuevo redunda en un ahorro de tiempo y una optimización de costes impensables para los viajeros de la aviación comercial.
"Nuestra misión como brokers (asesores expertos en aviación) es aportar soluciones personalizadas y ajustadas a las necesidades específicas de cada uno de nuestros clientes. Somos muy conscientes de que la productividad y eficiencia son dos factores clave en la organización de los viajes de negocio y de que nuestro trabajo influye determinantemente en un recurso muy valioso, el tiempo, que cada vez gana más peso en un entorno cambiante y marcado por la creciente globalización. Gracias a nuestra dilatada experiencia en el sector, disponemos de una visión imparcial a la hora de buscar la solución que mejor satisface las necesidades de nuestros clientes", destaca el director general de Europair, Gerardo Manzano.