Durante una semana se incrementará la vigilancia, sobre todo en las carreteras convencionales, que es donde tiene lugar el 70% de los accidentes con víctimas. En la última campaña, realizada en el mes de abril, se denunció a más de 30.000 conductores sorprendidos en carretera cuando circulaban con exceso de velocidad.
Todavía es frecuente detectar a conductores circulando con grandes excesos de velocidad. Por ejemplo el pasado domingo, hacia las ocho de la tarde un control de velocidad de la Agrupación de Tráfico, instalado en la R-4 en Ocaña (Toledo), detecto a un vehículo circulando a 233 km/h.
En esa misma carretera fue detectado el jueves otro conductor circulando a 215 km/h. Ese jueves fue también sorprendido por la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife otro conductor que circulaba a 109 km/h por una calle con limitación a 40 km/h. El viernes 9 de agosto agentes de la Guardia Civil de Tráfico detuvieron a otro conductor que circulaba a 225 km/h en la autovía A-62 en el municipio salmantino de San Martín de Yeltes. Además, hay todavía casi un millón de conductores al año que en los controles practicados por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil exceden los límites de velocidad establecidos.
Como en anteriores ocasiones a la vigilancia que realizan en carretera los agentes de la Guardia Civil de Tráfico se suma la vigilancia y control desde el aire con el radar de la DGT Pegasus instalado en uno de los helicópteros. Este radar permite controlar la velocidad a la que circulan los vehículos y se utiliza principalmente en las carreteras convencionales.
A la vigilancia en carretera se suma la emisión en medios de comunicación de una campaña con anuncios para televisión y cuñas para emisoras de radio en los que se aconseja sobre la necesidad de cumplir los límites de velocidad.
Razones para cumplir los límites de velocidad
- Un aumento del 5% en la velocidad provoca aproximadamente un incremento del 10% en los accidentes que causan traumatismos y del 20% en los accidentes con víctimas mortales.
- A partir de 80 Km/h es prácticamente imposible que un peatón salve la vida en un atropello. A una velocidad de 30km/h, el riesgo de muerte del peatón se reduce a 10%.
- Llevar una velocidad adecuada podría evitar una cuarta parte de los muertos en accidente de tráfico.
- A 120 km/h se necesita una distancia superior a un campo de futbol para detener el vehículo que conducimos. Esta distancia no solo depende del vehículo, si no de las condiciones psicofísicas del conductor.
- El exceso de velocidad no solo incide en la seguridad vial, también tiene una influencia negativa sobre el medio ambiente, la calidad de vida y el consumo de combustible.