Sino nada más (y nada menos) que el principio de un largo camino, que han de hacer las personas que forman estas entidades. Desde el presidente al gerente, pasando por directivos y todos aquellos asociados que de verdad quieran aportar su valiosa contribución.
La cohabitación entre estructuras asociativas diferentes, cuando no enfrentadas, es quizá el principal reto para poder hacer mucho y hacerlo bien. O, cuanto menos, lo mejor posible.
En CEAVyT convergen directivos con maneras diferentes de entender el quehacer asociativo. Lo cual, lejos de ser negativo, es algo que debe enriquecer la Confederación. Es infinitamente más lo que une a este Sector, que lo que le separa. Y, para que esto último no sea un freno al proceso en marcha, parece necesario que se den dos condiciones: lealtad y generosidad, por encima de cualquier diferencia. Y respeto a las formas, además de hacia la diversidad que engloba esta Confederación, siempre desde la toma de decisiones consensuada e imposición de modos democráticos.
Respetar las decisiones mayoritarias (y apoyarlas pese a haber defendido otra postura) es tan esencial, como no hacer del proceso de toma de decisiones algo esclerótico y, menos aún, asambleario. Así no se gestiona una empresa, y tampoco se gobierna (y representa) a un Sector. Los Plenos de CEAVyT, al igual que su Junta Directiva, no deben ser ágoras diletantes, donde las intervenciones se centren en exponer criterios y hacer valer la propia opinión, en lugar de construir y aportar alternativas.
Si los ministros de Turismo de Iberoamérica llevan tres lustros ajustándose a cinco minutos de intervención en CIMET, viniendo desde América, tal vez no fuese mala idea incorporar un formato similar, que sea respetado por todos, a la hora de debatir temas.
La dilatada experiencia de gran parte de quienes formarán los órganos de gobierno de la Confederación, junto a unas normas aceptadas por todos, han de contribuir al quehacer asociativo.
El Sector tendrá, por fin, una sola voz. Con todo lo que ello comporta de esperanzador para las agencias. Una única voz que ha de ser la de todos. Y para ello es vital establecer cauces fluidos de comunicación interna. Sólo así podrá consolidarse, día a día, la unidad.
NEXOTUR ha contribuido, lealmente, a la unidad. En el convencimiento de que éste debe ser un Sector fuerte, y que lo que es bueno para éste es bueno para todos. Por eso ahora hace esta reflexión, elaborada a partir de buena parte de las muchas sensibilidades que lo forman.
Es cierto que lo logrado es mucho, gracias a todos los que han trabajado para hacerlo posible. Pero más aún es lo que queda por hacer. Parodiando a Kennedy, preguntarse qué puede hacer cada uno por CEAVyT y no que hará CEAVyT por nosotros, sería un buen principio.