Zoido ha explicado que la constructora apunta a una deuda de dos millones de euros, mientras que la dirección de obra señala 1,5 millones y la empresa pública de vivienda Emvisesa "no esta ni con uno ni con otro". Además, ha recordado que la empresa "aún no ha terminado de entregar los informes solicitados".
"Vamos a buscar la solución muy pronto para pagar lo que realmente se deba, no lo que pidan unos y otros", ha insistido, lamentando que la obra "se haya disparado en financiación y en plazos y que no hubiera sido supervisada". Zoido ha dejado claro que a partir de ahora todas las obras van a tener un control, y espera que "pronto se recupere el tiempo perdido y que las obras de Fibes se aceleren para que este cuanto antes a disposición de la ciudad".