Renfe ha cerrado 2010 con unas pérdidas de 19,8 millones de euros, lo que supone recortar en un 13% los números rojos de 22,7 millones contabilizados en 2009. La compañía ferroviaria ha registrado unos ingresos de 2.512,8 millones en el cómputo global del año, un 0,5% menos.
Si bien el beneficio bruto de explotación (Ebitda) ha crecido un 8,5%, hasta 211,1 millones de euros. Tal y como confirma la operadora, el ejercicio 2010 es el primer que ha dejado de recibir del Estado la partida de compensación de pérdidas que obtenía hasta ahora. De este modo, la comparación del resultado de 2010 con el de 2009 antes de que el Estado inyectara su compensación (unos números rojos de 87 millones de euros) arroja una reducción de pérdidas del 77,3%.
En cuanto a los gastos, han descendido un 0,2%, situándose en 2.301 millones de euros. Renfe destaca que esta ligera bajada se ha conseguido gracias a un "importante ejercicio" de contención de costes, y a pesar del encarecimiento del 6,9% de la energía eléctrica y del 25% del diesel.