En un informe publicado por el Centro Común de Investigación de la Comisión (JRC) se presenta por primera vez un panorama completo de los métodos de cálculo de las emisiones atmosféricas del transporte marítimo. Así, el documento alerta sobre la necesidad de adoptar medidas para disminuir las emisiones de los buques, de lo contrario éstas aumentarían hasta un 200% de aquí a 2050.
El estudio explica que el transporte marítimo es responsable de aproximadamente el 4% de las emisiones mundiales de CO2 de origen humano, lo que representa una huella de carbono tan alta como la de Alemania. "Aún no hay ningún acto que regule las emisiones del transporte marítimo internacional", asunto que se está debatiendo en la Organización Marítima Internacional y en el marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC).
Al respecto, la comisaria de Investigación, Innovación y Ciencia, Máire Geoghegan-Quinn, ha asegurado que el informe "pone de manifiesto la necesidad de reducir la contaminación provocada por los buques, y de otras muchas fuentes, tanto para controlar el cambio climático como al objeto de prevenir daños graves para la salud humana". Asimismo, destaca la labor científica del JRC, la cual "puede contribuir a orientar los avances políticos hacia la consecución de los objetivos de la Unión Europea (UE) en materia de innovación, así como los de la estrategia Europa 2020".
Algunas soluciones y legislación
El informe del JRC asegura que de no tomarse medidas, en los dos próximos años va a intensificarse la contaminación atmosférica en las principales vías marítimas debido a un incremento estimado de entre el 10% y el 20% de las emisiones de dióxido de azufre. "No obstante, con el nuevo acuerdo de la OMI, los barcos que navegan en las SECA del mar Báltico y el mar del Norte van a tener que utilizar un combustible con un contenido de azufre de solo un 0,1 % antes de 2015, como ya ocurre en los puertos de la UE en virtud de la legislación de la Unión".
Algunas soluciones aportadas por el estudio tienen que ver con la manera de reducir el consumo de combustible, los contaminantes atmosféricos y los gases de efecto invernadero, "por ejemplo perfeccionando el diseño, la propulsión y la maquinaria de las naves y optimizando su funcionamiento". El informe también analiza las cuestiones metodológicas que se plantea la comunidad científica respecto al impacto ambiental del sector marítimo y señala las lagunas en fuentes de información fiables y exhaustivas.
Asimismo, presenta un examen pormenorizado de la relación coste/eficacia y del potencial de reducción de cada una de las opciones tecnológicas descritas en el informe. Igualmente, el documento analiza cómo podrían introducirse políticas de mercado tales como un régimen de comercio de derechos de emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) para el sector del transporte marítimo a nivel internacional.
En cuanto a la legislación de la UE en materia de clima y energía, la estrategia Europa 2020 incluye el compromiso de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en al menos un 20% respecto a los niveles de 1990, o en un 30% si las condiciones son las adecuadas. Según esa legislación, todos los sectores de la economía deben contribuir a realizar esas reducciones de emisiones, en particular el transporte marítimo y la aviación internacionales.
Respecto a esta última, cabe recordar que recientemente los 190 países de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) han pactado imponer un tope a las emisiones de CO2 de la aviación internacional a partir de 2020, así como dejar libertad a los países que lo deseen para ir más rápido y priorizar las medidas basadas en mecanismos de mercado, como el sistema de comercio de emisiones que funciona en la UE. Así, la Comisión Europea (CE) cree que el acuerdo alcanzado por la organización sobre la reducción de emisiones en el sector aéreo legitima su plan de imponer topes a dichas emisiones en todos los aviones que despeguen o aterricen en la UE a partir de 2012 frente a los ataques de países como Estados Unidos.