Además, se analizará una tasa fiscal al queroseno usado como combustible en el Sector aéreo
Tras el acuerdo entre PSOE y Sumar en la Comisión de Transición Ecológica del Congreso, el Gobierno impulsará la reducción de vuelos que duren menos de 2,5 horas y tengan una alternativa en tren. Esta medida no se llevará a cabo en casos de conexión con aeropuertos-hub que enlacen con rutas internacionales.
Esta proposición no de ley hará que el Ejecutivo analice una posible restricción de los vuelos en jets privados, además de una tasa fiscal al queroseno usado como combustible en el Sector aéreo. En pro de favorecer el ámbito de la sostenibilidad, hace escasos días, la formación política Sumar también propuso el establecimiento de una nueva tasa turística que pretenden imponer a las estancias de los turistas. Además, querrían imponer un límite turístico a los destinos españoles.
Respecto a dicha tasa, según el Boletín Oficial de las Cortes Generales, Sumar registró una proposición no de ley para su establecimiento. Concretamente, se trataría de "una tasa que compense a la sociedad por el coste medioambiental que supone el ejercicio de determinadas actividades que distorsionan o deterioran el medio ambiente en el territorio contribuye inexcusablemente a mejorar las condiciones de vida de los territorios y por ende, de la sociedad española".
"El liderazgo y las herramientas pueden ser fomentadas desde la administración central, si bien las competencias en materia turística están descentralizadas, no así aquellas tocantes al empleo y la energía entre otras. El objetivo del Turismo debe ser mejor las condiciones de vida de la sociedad, y en este aspecto la ecotasa puede ayudar a paliar uno de los principales problemas que genera el Turismo de masas, el impacto sobre el territorio, lo que a la postre puede redundar en la adaptación del modelo turístico que permita generar unas condiciones de empleo diferentes y no introducir incentivos para que persista el alza de precios de las viviendas en las zonas turísticas", añaden.
Por todos estos motivos, proponen crear desde el Ministerio de Industria y Turismo una mesa de trabajo con las Comunidades Autonómicas competentes en la materia para coordinar propuestas tendentes a establecer tasas sobre estancias turísticas y de medidas de impulso del Turismo sostenible.
Mesa del Turismo y Secretaría de Estado de Turismo
Ante todas estas propuestas, la Mesa del Turismo de España respondía a la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, y rechazaba de pleno las propuestas de Sumar para limitar la actividad del Turismo español, olvidando que es el Sector locomotora de la economía y el empleo del país. “Con rigor nada bueno cabe esperar de medidas arbitrarias e insensatas como son la implantación de una ecotasa nacional al Turismo o la supresión de los vuelos domésticos de corto radio que, con pretexto de atender a la preservación del medio ambiente, lo que harían en realidad es dañar gravemente la competitividad del Sector Turístico al tiempo que encarecerían el acceso de los ciudadanos a la oferta vacacional y de ocio”, argumentaba el presidente de la Mesa, Juan Molas.
Desde la Mesa del Turismo, se reiteraba que "avanzar hacia regulaciones de este género constituye un gravísimo error de cálculo que pondría en riesgo el momento de bonanza que vive el Sector después de unos años muy duros". Respecto a la reducción de vuelos, se trata de una propuesta “descabellada” a juicio de la Mesa.
"Ya se ha producido el trasvase de la mayor parte del tráfico aéreo a la Alta Velocidad en aquellas rutas donde existe la alternativa; una parte sustancial de estos pasajeros de vuelos domésticos son viajeros en conexión de rutas internacionales, con lo que su eliminación supondría una pérdida notable de competitividad de los hubs de Madrid y Barcelona en favor de otros grandes aeropuertos internacionales como Frankfurt; y, en tercer lugar, las emisiones de CO2 de las principales rutas aéreas que se verían afectadas representan únicamente el 0,9% del total, según la estimación de la Asociación de Líneas Aéreas, de modo que el impacto de la medida sería más que cuestionable", justificaban desde el lobby empresarial.
A la luz de todo ello, Juan Molas añadía que “al Sector Turístico le gustaría saber cuál es la opinión del Gobierno y, en particular, del ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, respecto a las propuestas de su socio de coalición y si comparten su visión de que en lugar de evolucionar hacia un paradigma competitivo y sostenible del Turismo lo que debe hacerse es implantar una política de tasas, prohibiciones y techos turísticos”.
Justo en torno a ello, NEXOTUR habló con Rosana Morillo, secretaria de Estado de Turismo: "La implantación de una tasa sobre las estancias turísticas en los destinos es competencia de las Comunidades Autónomas y de los ayuntamientos, por lo que no entra dentro del ámbito de las competencias de la Secretaría de Estado de Turismo".
"Son los municipios los que, tras haber analizado su caso concreto, tienen que abrir, si así lo consideran, un debate sobre la conveniencia o no de implantar una tasa turística en su territorio. El debate sobre este instrumento fiscal concreto tiene que implicar necesariamente a los propios destinos", añadía Morillo.
Por otro lado y a nivel europeo, destacaba que más de la mitad de los Estados miembros de la UE aplican tasas turísticas, ya sea "a través de tarifas por persona y noche o como un porcentaje del precio de la habitación, sin que haya tenido consecuencias en la demanda". Así, "la tasa turística está implantada en países como Francia y, a nivel municipal, en destinos turísticos tan relevantes como Berlín, Milán, Florencia, Venecia, Lisboa, Oporto o Ámsterdam".
Incluso en territorio nacional, señalaba el caso de las Islas Baleares, "en el que desde hace años funciona con éxito". En concreto, aseguraba que su tasa turística no ha provocado ningún tipo de consecuencia negativa en los resultados, tanto en la llegada de viajeros como en el gasto turístico.