Una vez superadas las restricciones a la movilidad dejadas por la pandemia mundial de la covid, el turismo está volviendo a recuperar su peso como dinamizador de la economía española.
Aunque todavía lejos de las cifras récord de 2019, los ingresos del sector durante el pasado año se elevaron hasta los 159.500 millones de euros, un 12,2 % del PIB. Cifras que se superarán de largo en este ejercicio en el que se esperan más de 85 millones de turistas internacionales tras un verano que se antoja de ensueño. Los datos confirman que hasta el mes de abril ya no han visitado más de 21 millones de extranjeros, con una cifra récord para un mes de abril de 7,2 millones. Un jugoso negocio que está impulsando las previsiones de crecimiento de la economía de nuestro país por encima del 2 %.
La Comunidad deCastilla-La Mancha tiene al sector de MICE entre sus productos más destacados dentro del Plan Estratégico de Turismo de Castilla-La Mancha 2020-23
Sin embargo, El sector cuenta con algunos puntos débiles como la estacionalidad y el gasto por turista. Para ello todas las comunidades autónomas, entre ellas Castilla-La Mancha, vienen trabajando en pro de un turismo de congresos clave en la desestacionalización y en la activación económica y social.
El turismo de congresos ofrece un valor añadido al turismo tradicional debido a la capacidad que tiene de atraer visitantes en cualquier época del año, así como al elevado impacto económico que genera -mayor número de puestos de trabajo, engloba múltiples empresas de distintos servicios y mejora del posicionamiento del territorio- y a la oportunidad que supone para que las empresas hagan “networking” e intercambien conocimientos entre ellas.
No en vano, las visitas a los congresos generan el 25% de la facturación total del turismo nacional, pues este tipo de turistas puede llegar a gastar hasta cuatro veces más que un turista tradicional. El informe elaborado por la empresa de soluciones de pago UniversalPay, refleja que, solo en el primer trimestre de 2023, el turismo corporativo y de negocios ha crecido un 38 %.
Según los datos recogidos en el informe de UniversalPay, el crecimiento registrado entre los resultados del primer trimestre de 2021 y 2023 ha sido del 171%, “y todo apunta a que seguirá incrementándose en los próximos meses”. Por su parte, los últimos datos aportados por Turespaña confirman el liderazgo nacional como destino de este tipo de eventos, superando a otros países como Francia, Alemania, Italia y Reino Unido.
El alto impacto económico del turismo de negocios
Otro dato que confirma la reactivación del sector: como refleja la información del Calendario Oficial de Ferias Comerciales Internacionales del año 2023, en España hay programas un total de 105 ferias internacionales por las 94 que se celebraron en 2019.
Por su parte, los datos de Spain Convention Bureau reflejan que una cuarta parte de los turistas del mundo lo hacen por negocios, ya sean reuniones, congresos o convenciones. Esta cantidad representa a 280 millones de personas, lo que implica un importante impacto económico para cada uno de los lugares donde se desarrollen estas citas.
En España el turismo de negocios genera más de 7.000 millones de euros anuales con mucho mayor poder adquisitivo y gasto medio que el turista de ocio.
España es el tercer destino mundial en celebración de reuniones, congresos y eventos internacionales y la capital catalana es la cuarta ciudad a nivel mundial que organiza más congresos, según las estadísticas de la ICCA, liderados por Madrid y Barcelona con cerca del 50 % del total de encuentros profesionales.
Así las cosas, dentro del ámbito del turismo de negocios aquel referido a los congresos, conocido como MICE es, desde hace tiempo, una pieza clave de la industria española.
Castilla–La Mancha sigue creciendo en el turismo de congresos
En los últimos meses, la comunidad castellano-manchega ha realizado una importante apuesta por el sector de reuniones, eventos, incentivos, conferencias y exposiciones (MICE) como forma de aprovechar la importante recuperación turística en su objetivo de impulsar la actividad económica de la región.
Con el fin de recoger un buen pellizco de los 7.000 millones de euros que genera al año en España, la Comunidad tiene al sector de MICE entre sus productos más destacados dentro del Plan Estratégico de Turismo de Castilla-La Mancha 2020-23. Este plan incluye acciones como la promoción de la reputación de la región “como destino de reuniones atractivo, competitivo, accesible, con modernas infraestructuras, diversidad de propuestas de ocio creativo y oferta atractiva en patrimonio cultural y natural”.
Durante este período, la región también se ha propuesto no solo apoyar a los convention bureaux ya existentes, sino también promover la creación de otros organismos locales o provinciales que puedan impulsarlo, así como diferenciar las acciones promocionales según la categoría de los eventos.
Todo ello en el marco de la recuperación tras la pandemia, en que la región ha apoyado al sector turístico con ayudas y subvenciones, así como con la creación del bono turístico, que han permitido a las empresas del sector realizar descuentos para atraer de nuevo a viajeros de negocios con un claro enfoque hacia la sostenibilidad y el respeto a la naturaleza, aspectos cada vez más demandado por el turismo internacional.