Según el director general global de FCM, Marcus Eklund, la decisión de establecer una oficina en Barcelona ha estado motivada por «los requisitos cambiantes de los clientes». «Estamos encantados de consolidar nuestra presencia en la Península Ibérica». «Al cambiar a una estrategia directa al mercado, podemos brindar un servicio de gestión de viajes totalmente flexible y personalizado al tiempo que aumentamos nuestra capacidad para identificar y llenar los vacíos del mercado», añade Eklund.
Al frente del equipo de Barcelona está Solenn Le Brazidec, una veterana de la industria de viajes de 20 años que también supervisa los negocios de FCM en Francia y Suiza. Se ha encargado a Le Brazidec que desarrolle relaciones con proveedores locales y aumente la base de clientes en España.
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