Invitan a redescubrir este espacio a través de exposiciones de arte, propuestas gastronómicas y música
Por ello, este otoño El Palace Barcelona recupera el antiguo esplendor de su Hall con una novedosa agenda de actividades y servicios que invitan a redescubrir este espacio a través de exposiciones de arte, propuestas gastronómicas y música en directo, conformando un ambiente elegante y dinámico que volverá a hacer de este espacio el alma del hotel.
Además, la colocación de una elegante barra al final del Hall, junto con el cambio de ubicación del piano y sutiles modificaciones en la iluminación, conforman un ambiente más cálido y contemporáneo a la vez que proyectan la mirada hacia el fondo de la sala, lugar en el que se abre el nuevo espacio del bar.
Exposiciones de arte
El vínculo entre El Palace Barcelona y el arte viene de lejos: sus paredes han sido testigo mudo de la vida y obra de numerosos artistas, circunstancia que incluso da nombre a las Art Suites, seis habitaciones inspiradas en personajes referentes en diferentes disciplinas artísticas que, además, hacen gala de una estrecha relación con el hotel.
Con la firme voluntad de continuar invirtiendo en el estrecho vínculo entre el hotel y el arte, así como con la intención de apoyar el trabajo de artistas tanto emergentes como más consolidados, El Palace Barcelona inaugura un ciclo de exposiciones en su gran Hall, cuyo pistoletazo de salida tendrá lugar el 28 de octubre con "Reti di terra" de Gandolfo Gabriele David, artista siciliano afincado en el País Vasco cuya complejidad identitaria se refleja en lienzos que evocan las redes de pescadores de su tierra de origen y de acogida realizadas con tierra del Monte Igueldo.
La exposición, que estará operativa hasta el 24 de noviembre, gira en torno a un conjunto de obras iniciadas en la isla de Ustica en Sicilia, con el objetivo de traducir en imágenes la riqueza de las narraciones y mitologías relacionadas con el mundo de la tierra y del mar de esta isla. Los paisajes del País Vasco, donde las redes de pescadores de Pasaia convergen con la tierra de los pequeños agricultores del monte Igueldo, completan la obra en una maravillosa síntesis entre dos mundos y dos culturas diferentes. Todas las obras expuestas están a la venta.