En un contexto en el que
el medioambiente es una preocupación que cada vez se arraiga más en la sociedad española, España se postula como uno de los países donde más se consolida este tipo de Turismo sostenible,
con un incremento de las reservas de hasta un 237% sólo en el último año, según los datos de Weekendesk.es. Este crecimiento se sitúa por encima de la media global (189%) en el conjunto de los mercados analizados, entre los que se encuentan Francia, Bélgica, Luxemburgo y Países Bajos.
Los clientes priorizan aquellas que incluyen alojamientos de tres o cuatro estrellas, con actividades gastronómicas
Este aumento espectacular en las ventas va en consonancia al creciente interés por reducir la huella de carbono, lo que ha hecho que los españoles opten por los destinos más próximos para pasar sus vacaciones. Según la plataforma de reservas, este año las reservas apuntan a que viajamos un 30% más cerca de casa, lo que se traduce en un importante auge de los destinos locales. Ahora la distancia media que recorren los clientes para disfrutar de escapadas eco es de unos 68 kilómetros, muy por debajo de los 80 – 100 kilómetros que recorrían antes de la pandemia.
Cataluña, destino líder
En este sentido, Cataluña es el destino más demandado para este tipo de vacaciones, gracias a su atractiva oferta de alojamientos ecosostenibles, agrupando el 75% de las ventas. Le siguen Andalucía, aglutinando el 14% de las reservas; además de las Comunidad Valenciana con el 9% de las ventas. Precisamente son los residentes de esas regiones los que más demandan este tipo de escapadas, priorizando aquellas que incluyen alojamientos de tres o cuatro estrellas, con actividades gastronómicas (48% de las ventas).
Para recibir este incremento de las reservas, desde Weekendesk.es aseguran que "los alojamientos se han adaptado para ofrecer a los clientes una experiencia respetuosa con el medioambiente de principio a fin". "Además de haber implementado al menos una o dos fuentes de energía renovables como la solar o la eólica y optar por la iluminación de bajo consumo, los establecimientos se preocupan por hacer que todas las acciones cotidianas tengan un impacto mínimo, como por ejemplo el uso de productos de limpieza y detergentes no tóxicos", añaden.