'No digas que fue un sueño', título de la novela con la que Terenci Molx ganó el premio Planeta en 1986, servirla para definir a la perfección lo que se siente al despertar en el Alhambra Palace. Es abrir los ojos y darse cuenta de haber pasado a formar parte de la centenaria historia de un 5 estrellas inaugurado en 1910 nada más y nada menos que por un rey: Alfonso XIII, bisabuelo de nuestro actual monarca Felipe VI. El hotel, ubicado en la antesala de la Alhambra granadina e ideal para completar una escapada andalusí fascinante e inolvidable, fue objeto de una profunda renovación hace apenas cuatro años en sus todas sus habitaciones de estilo más tradicional y estrenando una decena más hasta configurar una gran variedad de opciones y emociones difícilmente igualables.
Ubicado en la antesala de la Alhambra granadina e ideal para completar una escapada andalusí
Cuatro suites son las joyas del establecimiento: de estilo contemporáneo y minimalista, con vistas a la ciudad o al bosque de la Alhambra. Inauguradas en 2017, disponen de dos dormitorios, dos baños y salón en un espacio de entre 67 y 80 m2. De ellas, tres disponen de terraza. Sus suelos son de madera y los baños de mármol, con celoslas neo-nazaríes, esteres automáticos, iluminación nocturna y un equipamiento de vanguardia.
Asimismo cuenta con 11 ‘Junior Suites’ de entre 43 y 59 m2: Habitaciones luminosas y panorámicas que permiten al huésped disfrutar de increíbles vistas a la ciudad. Otras seis ‘Deluxe’ que comparten el estilo contemporáneo y minimalista de las suites, aunque con bañera exenta y vistas exteriores al bosque de la Alhambra. Y por ultimo, el alojamiento cuenta con 42 habitaciones ‘Classic Vista Ciudad’ y 45 ‘Classic Vista Exterior’.