El objetivo de este nuevo estudio es analizar los
patrones de movimiento de la población y poder extraer conclusiones como cuáles son las ciudades más visitadas en vacaciones. Actualmente, el INE está recabando datos para realizar un tercer análisis entre julio y diciembre, para conocer el patrón de movimientos durante la recuperación de la normalidad.
Actualmente, el INE recaba datos para conocer el patrón de movimientos tras el estado de alarma
Basándose en los datos de 2019, INE pone de manifiesto la
estacionalidad de la movilidad poblacional. Por ejemplo, Noja, en Cantabria, pasó de unos 6.400 residentes a más de 35.000 personas en verano, casi cinco veces más de su población habitual, situación similar en municipios cómo Sallent de Gállego, Puerto de Santa María, Peñíscola, Oropesa del Mar o Gandía, que aumentaron entre tres y cuatro veces su población el día analizado. Por el contrario, zonas de localidades como Sant Boi de Llobregat, Córdoba o Alcoy llegaron a tener un cuarto de su población regular.
En estos mapas también
se puede visualizar el flujo de movimiento y determinar desde dónde y hacia dónde se desplazan los españoles. Así, mientras que los madrileños prefieren veranear en la costa levantina (como Gandía y Denia), los barceloneses prefieren la costa de su propia Comunidad (Palafrugell, Platja d'Aro o Calafell), al igual que los valencianos (Denia y Jávea) y sevillanos (Chipiona, Rota o Almonte). Por otro lado, los zaragozanos prefieren áreas de montaña (como Sallent de Gállego y Jaca) y la costa catalana (Salou).