El Centro, gestionado por la empresa francesa GL Events, ha pausado los fogones para
comenzar a preparar el regreso a la actividad, pero mantiene el compromiso con la ciudad y
sigue abierto a las iniciativas que ayuden a paliar los efectos derivados del coronavirus. WCK no se ha ido y continúa elaborando comidas en Barcelona en diferentes localizaciones.
El 26 de junio fue el último día del proyecto de WCK en el Centro de Convenciones ubicado en el Fòrum. La ONG fundada por Andrés en 2010 y con sede en Estados Unidos, provee alimentos en todo el mundo a los afectados por crisis humanitarias. A raíz de la pandemia de la Covid-19, inició la acción en Estados Unidos para repartir comida a través de restaurantes independientes. En España, la iniciativa aterrizó bajo el lema #ChefsforSpain y, en Barcelona, la acción llegó a finales de marzo con el chef Carles Tejedor.
La alianza entre el CCIB y WCK comenzó el 18 de abril. La ONG necesitaba un espacio más grande en Barcelona para elaborar miles de menús y
el CCIB dispone de 3.300 metros cuadrados de cocinas. "Desde el CCIB y nuestro grupo, GL Events, pusimos las instalaciones al servicio de la ciudad desde el primer día" y "ya habíamos acogido un centro logístico de la Generalitat para distribuir material sanitario en las residencias". "Siempre queremos hacer más por la sociedad", afirma el director general del CCIB,
Marc Rodríguez, y añade que, con la actividad congresual parada, "
las cocinas solidarias del CCIB han sido el evento más importante que hemos hecho este año".
El CCIB dispone de 3.300 metros cuadrados de cocinas dirigidas por
Diagonal Food, empresa del grupo GL, con equipamiento de última generación y capacidad para preparar
hasta 30.000 servicios en un día. Además, están certificadas con la ISO 22000:2018 que garantiza el cumplimiento de
los máximos estándares de seguridad alimentaria.