Esta actuación será el primer evento que se celebre en el recinto tras
cuatro meses sin ferias, congresos, actividades deportivas, musicales, exposiciones… y supone retomar el pulso de las actividades profesionales y de ocio que habitualmente ocupan el calendario de la Feria. El patio central albergará durante los meses de julio y agosto conciertos en formato acústico,
con aforos para 400 personas, de modo que se garantiza el cumplimiento de las medidas de seguridad exigidas en cuanto a distancia social y protección.
Respecto a la recuperación de la actividad ferial, los organizadores españoles y europeos trabajan con el horizonte del mes de
septiembre, si bien algunas entidades celebrarán algún certamen en el mes de julio. La Asociación de Ferias Españolas (AFE) subraya que los certámenes comerciales, celebrados en entornos responsables y seguros,
pueden ser una herramienta clave para ayudar a la reconstrucción económica, especialmente de las pequeñas y medianas empresas.