La institución catalana ha firmado un acuerdo con su proveedor
Endesa Energía para que toda la energía eléctrica que se utilice en sus recintos de Montjuïc y
Gran Via sea certificada de origen 'verde', es decir
, provenga de fuentes renovables como la solar, eólica, hidráulica, biomasa, mareomotriz, geotérmica o biogás. Esto incluye todo el consumo de los stands de los expositores y de la propia actividad ferial, el alumbrado de las instalaciones y el que generan los propios equipos y sistemas de los recintos. La iniciativa permitirá evitar la emisión de 12.500 toneladas de CO2 al año, lo que equivale a plantar un millón de árboles para compensar esta cantidad de C02.
Para el director general de Fira de Barcelona,
Constantí Serrallonga, este cambio hacia un modelo de energías de origen renovable supone "
dar un paso importante en materia de sostenibilidad y en el compromiso con fomentar el desarrollo sostenible de nuestra actividad, el uso responsable y eficiente de los recursos, la protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático. Una iniciativa que refuerza aún más nuestro compromiso con asumir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, fijados por las Naciones Unidas en el marco de la Agenda 2030".