El presidente de la entidad, Jordi Mestre, ha destacado los esfuerzos que realizan desde el Barcelona Convention Bureau y desde Fira de Barcelona para la promoción de la ciudad como destino MICE y en la captación de eventos. A pesar de ello, ha advertido de la reducción de reuniones respecto a los últimos años, sobre todo de aquellos eventos que se realizan en los hoteles.
El Turismo MICE "es estratégico y vital para Barcelona"
Mestre ha explicado que los grandes eventos se confirman con años de antelación, pero son las pequeñas y medianas reuniones —las que se organizan en los establecimientos hoteleros— las que tienen más facilidad para cambiar de sede ya que se confirman con solo algunos meses de antelación. En este sentido, según el presidente del Gremi, "hace falta hacer un esfuerzo para mantener este segmento de negocio, ya que es estratégico y vital para Barcelona. No en vano, el impacto económico del Turismo de Reuniones en la ciudad de Barcelona es de más de 1.900 millones de euros al año".
Un contexto poco favorable
Jordi Mestre ha recordado los últimos datos disponibles sobre la actividad MICE en la ciudad condal. Barcelona albergó
1.728 reuniones durante 2018, un 19% menos respecto a las celebradas en 2017 (2.134 reuniones), un 12,5% menos respecto a las celebradas en 2016 (1.974 reuniones) y un 23,8% menos respecto a las celebradas en 2015 (2.268 reuniones). Además, bajaron
los datos de asistentes un 3,5% respecto 2017. Todo ello, según han asegurado desde el Gremi, provocado por la situación vivida en los últimos años, donde no se ha favorecido un contexto favorable para la captación de estos eventos.
