El hotel ha confiado en Ilmiodesign para ejecutar este proyecto de interiorismo
Con el objetivo de brindar a los huéspedes y visitantes un espacio más acogedor, el hotel ha confiado en Ilmiodesign para ejecutar este proyecto de interiorismo. El estudio desarrolló la propuesta basándose en la premisa de idear un espacio cálido y que invite a pasar el tiempo en él, algo que se ha logrado con la presencia de elementos curvos y el uso de colores contrastados que conviven en armonía. Como sello de identidad, destacan sus piezas de mobiliario y lámparas confeccionadas ad hoc para Barceló Málaga.
La visión de este re-styling proviene de Andrea Spada y Michele Corbani, quienes además de eliminar barreras arquitectónicas preexistentes en el espacio para hacerlo más uniforme y dinámico también han creado una atmósfera acogedora con piezas de mobiliario únicas y memorables.
Para hacer de la sala un espacio humano y atractivo, Spada y Corbani decidieron incorporar en el diseño de la planta la línea curva, que visualmente aporta dinamismo y movimiento al espacio, pero también confieren un aire de sutileza y elegancia. La paleta de colores elegida por el estudio incluye distintas tonalidades de rosa (presentes en el gresite, los paramentos, las sillas y los asientos), turquesa, beige y dorado. Por su parte, la luz juega un papel muy importante en la creación del ambiente de la planta, por lo que la propuesta incluye iluminación ámbar, casi dorada, que da una sensación de tibieza al espacio.
El mobiliario adquiere un papel protagónico en la nueva imagen del lobby y el gastrobar, ya que reafirma el carácter del espacio y le dota de personalidad. Por esto, se crearon piezas únicas y pensadas en exclusiva para el concepto creativo del proyecto. Por ello, el estudio ha diseñado parte del mobiliario interior (mesas y bancadas), exterior (asientos y mesas de la terraza de La Santa María), así como gran parte de las lámparas.
Más que un hotel, el punto de partida de un viaje
Ubicado en pleno centro de Málaga y con acceso exclusivo a la estación de trenes María Zambrano, Barceló Málaga ofrece a los huéspedes y visitantes la oportunidad de vivir experiencias que convierten al hotel en el lugar de inicio de un viaje único. Apenas cruzar la entrada, el recibimiento lo da un imponente tobogán cromado que desciende desde la primera planta; y a pocos pasos se encuentra el nuevo gastrobar La Santa María, con una original oferta de “tapas viajeras” que combina la cocina internacional con toques locales, y cuyo menú se puede disfrutar en alguna de sus elegantes mesas interiores o en su cómoda terraza a pie de calle. Por si fuera poco, el hotel también cuenta con un rooftop bar, B-Heaven, en el que se puede disfrutar de un chapuzón en su piscina acristalada o de un refrescante cóctel mientras se contempla el atardecer sobre el skyline malagueño.
