Para familias, el hotel cuenta con habitaciones renovadas de hasta para cuatro personas tematizadas con perros dálmatas o con coches de carreras, una zona de juegos habilitada para menores de hasta ocho años y una sala polivalente con Wii, mesa de billar y futbolín, para niños más mayores. Con un aforo de entrada limitado y con cargo adicional, todos los días de 12 a 17h (el horario para el resto del público es hasta las 20h), los niños pueden acceder en compañía de un adulto a su zona wellness.
La dirección de Daguisa Hotels espera superar o al menos igualar los resultados de ocupación del pasado verano
Las parejas y los grupos de amigos que vengan a Canillo para hacer turismo activo también pueden disfrutar de la zona de aguas del hotel que tiene todo lo necesario para relajarse y desconectar después de pasar un día de montaña. El área wellness tiene una extensión de 128 metros cuadrados aproximadamente y está compuesta de piscina, jacuzzi, cascadas, jet, sauna finlandesa, cabina de hielo, hamman y duchas bitérmicas. Además, dispone de cabinas especiales de hidromasaje y de Hydrojet y de una carta de tratamientos faciales y corporales.
Su ubicación a escasos metros del Telecabina del Family Park de Grandvalira, del Palacio de Hielo o del Museo de la Moto, así como del Mirador del Roc del Quer y de la Iglesia románica San Serni de Canillo hacen que sea un alojamiento con una situación idónea para disfrutar de unas vacaciones muy activas y variadas de turismo cultural, de naturaleza, gastronomía y wellness.
La dirección de Daguisa Hotels espera superar o al menos igualar los resultados de ocupación del pasado verano, cuando tuvieron en el Hotel Font d’Argent Canillo cerca de 1.300 noches de habitación y 3.000 personas alojadas.