Aclara que ‘la calidad no se construye a través de las redes sociales’
Pone como ejemplo el trabajo que
ha desarrollado el ICTE con el aval del Gobierno de España, propietario de este distintivo. "La labor que ha venido desarrollando durante estos años
certificando a miles de establecimientos españoles es un ejemplo vanguardista de la actividad turística a nivel mundial", subraya Cabal.
En este sentido, advierte que "no se puede caer en el espejismo de creer que la calidad se construye a través de las redes sociales y que la opinión de los viajeros sin más es lo único que importa". "Para que los turistas opinen positivamente de un establecimiento, éste debe haber pasado por un proceso de estandarización de calidad para que sea merecedor de esta valoración", argumenta. Por todo ello, concluye que "
nuestra recomendación es que a nivel mundial, sistemas como el de la ‘Q’ de Calidad deben seguir imponiéndose".