El índice OHE Hotelero se sitúa en 50,93 produciéndose por primera vez en los últimos cuatro años un cambio en la tendencia evolutiva del indicador. Este índice refleja estabilidad tras los buenos resultados obtenidos en las temporadas pasadas, al verse impactado fundamentalmente por una caída de la rentabilidad de los establecimientos, como consecuencia de un proceso natural de reajuste de los precios y un empeoramiento de los costes.
Según el director experto en Turismo de PwC España, Francisco Sanchís, “en el entorno macroeconómico se prevé estabilidad, aunque marcado por una ligera ralentización del crecimiento de la economía tal y como refleja este índice que se sitúa en los 42,51 puntos. La suave desaceleración económica está repercutiendo a nivel mundial, aunque el PIB español mantiene su crecimiento en torno al 2%, tasa ligeramente superior a la de nuestros vecinos europeos”.
Las previsiones hoteleras reflejan estabilidad y continuismo para la Semana Santa de 2019
Las previsiones de los hoteleros son de estabilidad para la temporada Semana Santa - primavera 2019, dejando de lado los pronósticos de positivismo y mejora manifestados en los ejercicios pasados. Pese a que este sentimiento de continuismo se refleja en la mayoría de los factores analizados, destaca el índice de rentabilidad hotelera con una puntuación inferior a los 40 puntos. El empeoramiento de los costes y una disminución del precio medio son los principales factores que hacen que las perspectivas de rentabilidad sean negativas.
Tras el optimismo alcanzado en las temporadas primaverales de 2016 y 2017, el subíndice de pernoctaciones ha descendido de forma continua desde 2016 hasta los 57,35 puntos en 2019 augurando estabilidad.
La gran mayoría de los hoteleros espera que las pernoctaciones de los turistas tanto nacionales como extranjeros no descienda, tal y como demuestra respectivamente el 99% y el 63,1% de los encuestados. Las perspectivas sobre el incremento de llegadas de turistas nacionales son muy positivas respecto al ejercicio anterior, mientras que se prevé que se mantenga la llegada de turistas procedentes de Alemania, Reino Unido y países nórdicos con un repunte en la llegada de turistas procedentes de Francia.
Las previsiones del Sector Hotelero respecto a la estancia media de los viajeros, se mantienen estables tanto para el turismo nacional como para el extranjero, tal y como indican los 45,89 puntos del estudio.Según el presidente de CEHAT, Juan Molas, observamos unas buenas perspectivas del mercado nacional para esta semana santa y los diferentes puentes del mes de mayo, pero, por otra parte, estamos preocupados por la posible aplicación de un Brexit duro que puede suponer una caída cercana al 15% en la llegada de turistas británicos a España la próxima temporada estival.
Por su parte, el secretario General de CEHAT, Ramón Estalella, ha señalado que “hay dos vertientes de pensamiento según el enfoque que se le de a la situación turística: por un lado, están los catastrofistas que ven cómo el turismo está sufriendo una desaceleración respecto a temporadas pasadas y temen que siga con esta tendencia; y, por otro lado, los optimistas, que piensan que lo mejor que puede suceder es mantenernos estables, ya que estamos viviendo unos años de cifras récord”.
En este sentido, Estalella considera que, aunque no existe crecimiento por lo que se desprende del índice, el simple hecho de “empatar” con el mejor año del turismo español, es ya de por sí una gran noticia. Sin embargo, se observa con preocupación las dificultades de muchas aerolíneas, pieza fundamental del viaje, que pueden ocasionarnos algunos problemas de infra capacidad sobre todo en los dos archipiélagos y zonas turísticas de predominio extranjero. Estalella ha continuado su visión positiva afirmando que “las pernoctaciones van a ser similares a las del año pasado, aunque quedan las reservas de última hora, y que se mantendrán estables las cifras de turistas procedentes de mercados emisores pese a la recuperación de destinos como Turquía”.Por otro lado, las provincias donde se espera un aumento de la oferta hotelera son A Coruña, Lugo, Orense, Pontevedra, Madrid, Valladolid, Soria, Gerona, Valencia, Alicante, Murcia, Sevilla e Ibiza.
El dato más negativo de todo el informe, según ha apuntado Ramón Estalella, habla de la rentabilidad porque, “aunque los ingresos se mantengan, hay un incremento de los costes y una disminución del precio medio”. Por el contrario, se ha destacado la estabilidad del empleo en el Sector Hotelero, cuyas plantillas están “bien posicionadas” respecto a otros sectores.
Factores que preocupan al Sector
En opinión del socio responsable de Turismo, Transporte y Servicios de PwC, Cayetano Soler, “hay factores muy preocupantes para nosotros: los principales mercados emisores (Francia, Alemania y Reino Unido) desde el punto de vista de crecimiento están en una situación complicada y con una ralentización mucho mayor que la que tiene España a nivel de su producto interior bruto; la situación del Brexit, que sigue siendo un quebradero de cabeza para instituciones, gobiernos, empresas y ciudadanos, ya que causa el cansancio de la población al no haber acuerdo y la incertidumbre afecta a toda Europa”.
Por otro lado, la principal preocupación que tienen los hoteleros se sustenta en los cuatro componentes del coste, “se ha disparado el coste laboral, el coste energético, el coste de distribución y el coste de financiación, por lo que la rentabilidad del Sector es una preocupación latente”.
Por último, Soler ha señalado que “continuamos con un proceso progresivo de desaceleración en el crecimiento del negocio turístico, como consecuencia de los factores macroeconómicos indicados, de la recuperación de los principales competidores y del impacto de factores externos muy relevantes, como la situación definitiva del Brexit y tasas menores del crecimiento global, sobre todo de los principales países emisores. No obstante, hay factores que pueden empujar nuestro crecimiento y diferenciación, como son los procesos tecnológicos y de digitalización implementados; las inversiones de todos los agentes para la mejora del producto y servicio, la capacitación del capital humano; el desarrollo más equilibrado de todas las comunidades; el crecimiento del turismo de negocio y la concienciación en la sociedad de la relevancia que está teniendo la industria para el desarrollo económico del país”.