La multinacional española Global Exchange ha resultado adjudicataria en exclusiva del servicio de cambio de moneda en el Nuevo Aeropuerto Internacional de Estambul. Se trata del mayor contrato aeroportuario en la historia de la compañía en la que será la mayor infraestructura aeroportuaria del mundo.
El Nuevo Aeropuerto Internacional de Estambul será el principal aeródromo de Turquía y el quinto en tráfico aéreo de Europa, tan sólo por detrás de Heathrow (Londres), Charles de Gaulle (París), Schiphol (Ámsterdam) y Frankfurt. Con una inversión estimada de
10.250 millones de euros, el nuevo aeropuerto se convertirá en el único del mundo con
seis pistas independientes, asentado sobre una superficie total de 76,5 millones de metros cuadrados, 1,4 millones de metros cuadrados construidos y un área comercial de 100.000 metros cuadrados, que le permitirán
albergar hasta 200 millones de pasajeros al final del proyecto, conectando 350 destinos, a través de 100 aerolíneas.
La inauguración del Nuevo Aeropuerto Internacional de Estambul está prevista para el próximo
29 de octubre, lo que supone para
Global Exchange abrir 40 nuevas oficinas en un tiempo récord. Para poder acometer este gran reto,
se ampliará la plantilla de la filial turca hasta sumar 500 personas, que representa un incremento del 25% del personal de la multinacional salmantina. Como consecuencia de todo lo anterior, la filial turca se convertirá en una de las mayores del Grupo Global Exchange.
El presidente de Global Exchange,
Isidoro J. Alanís, ha comentado que "esta adjudicación supone un antes y un después para Global Exchange;
es el mayor proyecto de expansión internacional, tanto por número de oficinas como por la duración del contrato de concesión. Desde Global Exchange
hemos apostado firmemente por Turquía porque estamos convencidos de que la evolución del valor de la lira turca asegura el crecimiento turístico a doble dígito en los próximos años, lo que va a volver a convertir a Turquía en uno de los principales destinos turísticos a nivel mundial".